España cierra 2022 con 268.252 parados menos por la 'trampa' de los fijos discontinuos

España ha despedido el 2022 con unas cifras de paro históricamente buenas. En diciembre el número total de desempleados se situó en los 2,84 millones, 268.252 menos que un año antes y la cifra más baja del último quindenio, según los datos difundidos este martes por el Ministerio de Trabajo. Sin embargo, las sospechas de 'enjuague' estadístico con los contratos fijos discontinuos, modalidad 'protagonista' de la reforma laboral, enturbian estos datos.

En los últimos meses han aflorado en las estadísticas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) más de medio millón de fijos discontinuos inactivos (sin trabajo ni sueldo durante un periodo determinado) que no se contabilizan como parados, tal y como avanzó Vozpópuli.

Su peso es tan significativo que en los meses de octubre y noviembre, de haberse contabilizado como parados, habrían cambiado el signo de la variación mensual. Es decir, el paro habría pasado de decrecer (como informó el Gobierno en ambos meses) a crecer. Esto ha llevado a la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) a crear un nuevo indicador, denominado "paro efectivo".

Este martes el Ministerio de Trabajo ha comunicado una caída mensual del paro de 43.727 personas, en línea con los diciembres previos a la pandemia, pero falta por conocer el detalle de la estadística, que previsiblemente se publicará la próxima semana, para averiguar si en el último mes del año se repitió el fenómeno de los fijos discontinuos.

El Gobierno no informa de cuántos trabajadores con un contrato fijo discontinuo están en realidad parados, pero puede hacerse una aproximación de aquellos que se inscriben en el SEPE para buscar otro trabajo, recibir formación y/o cobrar la prestación por desempleo si han cotizado lo suficiente. Como mantienen su contrato con la empresa, aunque no trabajen no cuentan como 'parados', sino que se encasillan como demandantes de empleo con relación laboral.

A cierre de noviembre, el último mes del hay datos disponibles, había 575.746 personas registradas como demandantes de empleo con relación laboral. De este dato habría que descontar los trabajadores afectados por un ERTE, una cifra que desde hace meses se mantiene estable en los 20.000 personas, según los registros de la Seguridad Social, y que también se incluyen en la casilla de demandantes de empleo con relación laboral. El resultado son 555.746 fijos discontinuos inactivos. Esto es el doble que en un año 'normal': en 2019 había 280.542 demandantes de empleo con relación laboral.

La semana pasada se preguntó a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, por este asunto, pero evitó confirmarlo y cuantificar el número exacto de fijos discontinuos inactivos. Aseguró no tener esa información y criticó a los servicios de estudios, como Fedea o BBVA Research, que han alertado de esta "distorsión" en el paro.

Estos expertos critican que el Gobierno no lo reconozca y tampoco facilite datos más detallados para estudiar la situación del mercado laboral. El SEPE cuenta con información que, difundida de manera anonimizada, permitiría saber los motivos por los que pasan a estar inactivos, cuánto tiempo lo están y si cobran la prestación por desempleo. Detalles relevantes, según los expertos, para analizar el efecto de la reforma.

Este martes, durante la rueda de prensa posterior a la publicación de los datos de diciembre, el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha asegurado que durante toda la serie histórica nunca el Ministerio de Trabajo ha proporcionado este dato porque "no ofrece la suficiente garantía estadística". No obstante, ha apuntado que "lo están depurando" y que "lo darán cuando lo tengan listo", sin detallar cuándo.

Un diciembre 'flojo' en afiliación

En términos de empleo, se ha conseguido alcanzar la cifra de 20 millones de afiliados que el país llevaba más de una década persiguiendo. A lo largo del año, el incremento ha sido de 471.360 afiliados, quedando finalmente por debajo del medio millón que se auguraba para este año por un final de 2022 a medio gas.

El mes de diciembre, tradicionalmente bueno por la campaña de Navidad, fue especialmente 'flojo': la afiliación media sólo creció en 12.640 personas, siendo éste el menor repunte del empleo en diez años, desde 2012, cuando se destruyeron 88.367 puestos de trabajo respecto a noviembre. En términos desestacionalizados, según los datos avanzados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, se perdieron 8.300 afiliados.

Destaca el menor crecimiento en el sector servicios este diciembre que el pasado, con solo 22.578 afiliados más (frente a los 72.632 de 2021, los 36.500 de 2019 y los 50.700 de 2018). La hostelería perdió 24.000 empleos y el comercio ganó 24.500. La agricultura ganó 16.500 (frente a los 26.900 de 2021) y la industria perdió 10.700 (frente a los 7.300 empleos que se destruyeron un año antes).

El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha negado esta ralentización del empleo en diciembre y ha asegurado que "la reforma laboral suaviza los elementos estacionales". "Un mes de diciembre basado en la estabilidad en el empleo no es lo mismo que un diciembre basado en la temporalidad, con contratos muy efímeros basados en las campañas. Esto hará que algunos meses los resultados bajen por debajo de la media, como en diciembre, y en otros la superen, como en noviembre", ha explicado.

Por su parte, el secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez, ha reconocido que "el resultado es menos positivo", pero también ha hecho hincapié en que "la composición del mercado de trabajo es distinta ahora y eso apunta a unas oscilaciones menos acusadas". Además, ha destacado otros elementos, como el hecho de que el mercado de trabajo se encuentre en niveles de afiliación históricos, lo que hace que "en algún momento este ritmo de crecimiento tenga que moderarse"; y ha recordado que en diciembre siempre hay elementos coyunturales, como las lluvias importantes del puente, que probablemente tuvieron incidencia en algunos sectores.  

En todo caso, el Gobierno pone el foco en que "la media de afiliados a la Seguridad Social en el conjunto del año, 20.110.215 afiliados, es la cifra más elevada de la serie histórica" y que "se ha alcanzado el nivel más elevado de mujeres ocupadas, tanto en número como en porcentaje (el 47,1%) desde que hay datos de afiliación".