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Economía

Hacienda sancionará a 3.500 contribuyentes que han declarado fuera de plazo sus bienes en el extranjero

Aquellos contribuyentes que oculten a Hacienda cuentas, acciones, viviendas o tierras en el extranjero se exponen a duras sanciones que pueden oscilar entre los 5.000 euros por cada dato que omitan, al abono de hasta el 150% de la base de la sanción por no haber liquidado el Impuesto sobre la Renta o el de Sociedades. Hay también garantías legales para que no se acojan a las prescripciones que operan para los contribuyentes corrientes. Desde que el Gobierno aprobó hace dos años la nueva obligación, 134.872 declarantes con bienes fuera de España se han acogido a ella, pero casi 3.500 lo han hecho fuera de plazo y serán sancionados por Hacienda si no regularizan Renta o Sociedades.

El 'efecto Pujol' ha empujado a 700 grandes contribuyentes con activos en el extranjero a retratarse ante Hacienda

La obligación de informar sobre los bienes y derechos ubicados en el extranjero acogiéndose al modelo 720 de la Agencia Tributaria afecta a los titulares de cuentas, valores e inmuebles. Lo pueden hacer en el  primer trimestre de cada año, cuando el valor de los mismos supere los 50.000 euros por cada tipo de bien. La información ha dado lugar a más de 650 requerimientos de información o embargo de bienes de deudores ante autoridades extranjeras.

Según los datos más actualizados de los que dispone la Administración tributaria, antes del estallido del ‘caso Pujol’ se habían registrado en la Agencia Tributaria poco más de 134.000 de estas declaraciones correspondientes a la tenencia de bienes del ejercicio de 2012. La investigación abierta por Hacienda a la familia Pujol para aclarar el origen de su patrimonio en el extranjero ha empujado a 700 contribuyentes más  a declarar los activos que tienen fuera de España. El escándalo, pues, ha terminado sirviendo de señal de alarma para aquellos que estaban en deuda con el fisco.

Décadas fuera del radar del fisco

Quedan numerosos escondites en paraísos fiscales donde todavía se puede ocultar el dinero a buen recaudo, pero la experiencia dicta que muchos contribuyentes españoles que habían encontrado hasta ahora refugio en Europa no quieren mover su patrimonio a otros continentes que ven menos seguros y han optado, al final,  por retratarse ante Hacienda. La presión ejercida desde la Agencia Tributaria a partir de 2012 ha terminado dando buenos resultados, pues al final todos los bienes aflorados tributarán en adelante de forma ordinaria después de haber podido estar durante décadas fuera del radar del fisco.

Fuentes de Hacienda acentúan el impacto positivo que esta declaración de bienes en el extranjero acabará teniendo sobre las cifras de deuda pública, uno de los lastres que más pesan sobre la economía española. Se trata de un saneamiento sin precedentes que cuando se traduzca a términos de contabilidad nacional y se integre en la balanza de pagos, ayudará a disminuir esta deuda ya que se trata de bases declaradas nuevas por importe equivalente a 10 puntos de PIB.

En Hacienda se destaca el impacto positivo que tendrá sobre la deuda el afloramiento de 10 puntos de PIB

Después de que el Gobierno aprobara en 2012 la obligación de detallar a Hacienda las cuentas corrientes, seguros, acciones, inmuebles y otros derechos valorados en más de 50.000 euros, la primera declaración, del ejercicio 2012, la presentaron 131.411 contribuyentes. A lo largo de este año han sido 3.500 los que han llamado a la ventanilla de la Agencia, 700 de ellos claramente bajo el ‘efecto Pujol’. La cifra ha ido engordando hasta los casi 135.000. Buena parte de ellos son grandes contribuyentes, asesorados por prestigiosos bufetes de abogados.

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