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Mercados

La campaña electoral y la incertidumbre política no frenan las salidas a bolsa

La bolsa española ha acogido hasta septiembre siete operaciones de salida al parqué por valor de 8.500 millones de euros.

Las dudas sobre el resultado de las elecciones del próximo 20 de diciembre y el escenario de pactos con que trabajan las distintas firmas de análisis internacionales no están siendo obstáculos para que las empresas decididas a dar el salto al parqué frenen sus planes de cotizar en bolsa. ¿La razón? Las firmas con los deberes hechos se encuentran con un escenario perfecto para encontrar inversores deseosos de colocar su dinero.

Un escenario político en España lleno de incertidumbres no es el mejor amigo del dinero, pero la política monetaria expansiva realizada por el Banco Central Europeo (BCE) augura un mundo inundado de liquidez por mucho más tiempo del que se preveía. Las palabras del presidente del BCE, Mario Draghi, durante su última comparecencia la semana pasada, apuntando que el programa de compra de deuda del organismo europeo podría prolongarse más allá de septiembre de 2016 han vuelto a poner de manifiesto la necesidad que tendrán los inversores de buscar oportunidades de negocio.

Los analistas aseguran que pesa más la volatilidad económica que la política porque ya se descontaba que 2015 sería un año de elecciones en España

Las compañías de tamaño medio lo saben y quieren aprovechar este viento de cola para iniciar o continuar su proceso de salida a bolsa, siguiendo la estela de firmas como Naturhouse, que aunque salió con un precio de cotización muy ajustado, en 4,80 euros por acción, tuvo buena acogida en el parqué. O la de Talgo, que también tuvo que poner el precio inicial de salida en el rango bajo de su horquilla de precios, en 9,25 euros.

Es cierto que la ralentización de la economía china y su repercusión sobre la economía global, especialmente en los países emergentes, y la alta volatilidad de los mercados no invitan a priori a las empresas a mantener sus planes de salir a cotizar. Hasta septiembre de este año, el mercado español ha sido el protagonista en Europa por el valor de las empresas nuevas en el parqué, con siete operaciones que han acaparado aproximadamente 8.500 millones de euros. Y esta tendencia no será la misma a finales de año. Pero el acceso a los mercados de capitales para financiar planes de expansión y demostrar fortaleza en el cumplimiento de planes estratégicos son objetivos a los que no renuncian los nuevos pretendientes.

Volotea, la línea aérea de bajo coste creada por los fundadores de Vueling; Aernnova, la empresa vasca dedicada a la fabricación de ciertas partes de los aviones; y Dominion, la filial de CIE Automotive dedicada a servicios tecnológicos, son algunas de las firmas que mantienen su intención de recurrir al mercado bursátil, aunque sin confirmar fechas ni plazos.

En el caso de Volotea se ha ido postergando la decisión hasta el último momento y no es descartable que se postergue hasta principios del próximo año hasta encontrar un momento de valoración más apropiado. La presencia con peso en su accionariado de firmas de capital riesgo significa que prefieran no arriesgar demasiado con la decisión. Igual ocurre con Cortefiel o Parques Reunidos.

Los analistas aseguran de todas formas que pesa más la volatilidad económica que la política porque ya se descontaba que 2015 sería un año de elecciones en España, con la consiguiente incertidumbre que generan estos procesos. Las encuestas han ido restando valor a las formaciones más extremistas a ojos de los inversores, por lo que no se teme un vuelco a las reformas que han permitido cierta recuperación económica.

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