Escrivá admite que un 30% de los trabajadores ha sufrido despidos, ERTEs o cese de actividad

El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha reconocido este miércoles que entre un 25 y un 30% de los trabajadores en España (entre asalariados y autónomos) han sufrido una caída en sus ingresos mensuales, bien porque han sido despidos, porque han sido afectados por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) o bien porque son autónomos que se han acogido a la prestación extraordinaria por cese de actividad.

"Estimados que entre un 25 y un 30% de los trabajadores en España se han visto afectados por una caída de renta", ha reconocido el ministro en una charla digital organizada por el Consejo General de Economistas. Un 30% del total de trabajadores en España equivale a entre 5 y 6 millones de personas, cuyos ingresos han caído porque la Seguridad Social cubre hasta un 70% de la base reguladora en el pago de las prestaciones. 

Escrivá ha precisado que en total 800.000 autónomos han pedido la prestación por cese de actividad, disponible para aquellos que o bien han tenido que cerrar por obligación con motivo del estado de alarma o bien han sufrido una caída del 75% en sus ingresos. Acogerse a esta prestación supone que quedan exonerados del pago de cuotas a la Seguridad Social. 

El ministro no ha indicado cuántas personas han sido despedidos a fecha de hoy, pero sí conocemos que a cierre de marzo había habido casi 900.000 despidos individuales en España. El número de trabajadores afectados por ERTEs tampoco ha sido precisado, aunque se calcula que son alrededor de 3,1 millones de trabajadores. 

La renta mínima llegará "pronto"

Escrivá ha explicado que el Gobierno está agilizando la aprobación de la renta mínima, aunque ha insistido en que no será una renta universal. 

"Estamos diseñando un ingreso mínimo vital que queremos tener pronto, es muy distinto a una renta universal, es algo que nos estaba pidiendo el Consejo Europeo en varias de las recomendaciones específicas que nos ha hecho en los últimos años porque tenemos mucha desigualdad, sobre todo en los percentiles más bajos de renta", ha precisado. 

Sí que tiene todo el sentido que adelantemos este ingreso mínimo vital, pero no estamos hablando de una renta universal"

En su opinión, España está atrasada en tener una red de protección para las personas más vulnerables, como familias con hijos a cargo o familias monoparentales. "Es algo sobre lo que hay cierto consenso, que es una parte del Estado de Bienestar que no hemos cubierto lo suficiente", ha apuntado.

"Estamos trabajando para acelerar el ingreso mínimo vital, que teníamos pensado para este año o el que viene, queremos hacerlo ahora porque en esta situación, aunque estos colectivos no sean los más afectados por la crisis del coronavirus, sí suelen resentirse cuando el entorno general económico se torna más adverso, ya que a veces viven de ayudas de familiares o de organizaciones no gubernamentales", ha explicado. 

La prestación se destinará a los hogares que tengan niveles de renta muy bajos, la Seguridad Social se la pagará íntegra o les complementará los ingresos hasta llegar un nivel de renta. Será compatible con incentivos para volver al mercado de trabajo.