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La Organización Mundial del Turismo tiene una fundación opaca en Andorra

Taleb Rifai, Secretario General de la Organización Mundial del Turismo.

Entre los pasados días 9 y 11 de mayo el Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial del Turismo (OMT) celebró en Málaga su 103 reunión. El programa incluía visita guiada al centro de la ciudad, paseo en barco por la bahía de Málaga, visita guiada a la casa natal de Pablo Ruiz Picasso, almuerzo en vinoteca, cena y espectáculo flamenco... El consejo del organismo presentó entonces el informe financiero de 2015 de la OMT elaborado por el Secretario General, el jordano Taleb Rifai. Si los asistentes leyeron el informe adicional al de auditoría de las cuentas anuales de 2015, emitido por la Intervención General del Estado, el ambiente festivo debió de torcerse.

La Asamblea General de la OMT, cuya sede está en Madrid, escogió a España como auditor externo para el periodo 2016-2017, y solicitó al Ministerio de Asuntos Exteriores el nombramiento de auditores. Dicha labor fue aceptada por la Intervención General del Estado, que además designó dos auditores de la Oficina Nacional de Auditoría para las cuentas de 2015. Los dos profesionales incluyen en su informe adicional del pasado ejercicio de la OMT una salvedad y otras advertencias que parecen impropias de un organismo dependiente de Naciones Unidas, cuyo presupuesto se nutre fundamentalmente de las contribuciones que realizan los Estados miembros (13,4 millones en 2015).

Los auditores apuntan una salvedad en las últimas cuentas de la OMT referida a la existencia de una fundación en Andorra en la que participa el organismo de Naciones Unidas y a la no presentación de sus cuentas de 2015. Se trata de la Fundación Themis, en la que la OMT participa al 50% y el resto del capital está controlado por el Gobierno andorrano. Los auditores del último ejercicio de la OMT advierten que los estados financieros de Themis del ejercicio 2015 no han sido auditados "lo que constituye una limitación al alcance de nuestro trabajo, que nos ha impedido obtener evidencia suficiente y adecuada sobre esta partida de Inversiones, cuyo importe asciende a 244.453,85 euros".

Los auditores de la OMT recomiendan al organismo más transparencia a la hora de contratar a individuos

"El control interno de la Fundación OMT. Themis presenta muchas debilidades y, por tanto, ofrece poca confianza", afirman los auditores, quienes subrayan que, según la normativa andorrana, la auditoría de la fundación "únicamente puede ser realizada bien por el Tribunal de Cuentas de Andorra, bien por un auditor designado por el Patronato de Themis para verificar sus cuentas". Los auditores españoles recomiendan que la fundación someta sus informes financieros a una auditoría externa "para lo cual no sólo tiene competencia sino parece que también obligación, a la vista de lo establecido en el artículo 27 de la Ley 11/2008 de fundaciones".

Los mismos auditores señalan que la OMT y el Gobierno del Principado de Andorra suscribieron un convenio en julio de 2014 sobre funcionamiento de la fundación del que se desprende que no es posible lograr las cuentas auditadas de la fundación por expertos externos e independientes. El apartado 4.5 de la cláusula IV de dicho convenio establece: “Anualmente, el Director de la Fundación presentará sus estados financieros anuales (del 1 de enero al 31 de diciembre) al Patronato para su aprobación. Los estados financieros seguirán la normativa de la Ley de Fundaciones y otra legislación vigente del Principado de Andorra. La verificación de cuentas se llevará a cabo anualmente por el Tribunal de Cuentas de Andorra, o en su defecto, por los auditores designados previamente por el Patronato".

La Fundación Themis, según la web de la OMT, se dedica a la organización de cursos sobre turismo. La fundación ha convocado un curso este año con la George Washington University que tiene un periodo de formación online, entre el 15 de agosto y el 25 de septiembre, y otro presencial, en la universidad estadounidense, entre el 8 y el 20 de octubre; el coste total es de 2.900 dólares.

Fichaje de Ana Botella

El pasado mes de abril la agencia Efe publicó que la exalcaldesa de Madrid, Ana Botella, había comenzado a trabajar como asesora sobre turismo urbano del secretario general de la Organización Mundial del Turismo, Taleb Rifai. El organismo confirmó la información, indicando que el cargo de Botella es "honorífico", y que el Secretario General de la OMT cuenta con más de 20 asesores en el mundo. La OMT no ha precisado si el cargo de Botella es retribuido y, en su caso, a cuánto asciende la retribución.

Los dos profesionales que han auditado las cuentas de 2015 de la OMT recomiendan en su informe la "revisión de los procedimientos de contratación seguidos por la OMT para contratar con individuos para garantizar la transparencia, concurrencia y el cumplimiento de la legalidad en los mismos".

Si bien la OMT dispone de procedimientos de contratación para contratar con empresas, para contratar con individuos sólo se establece una referencia al respecto en el artículo VI.38 de la Reglamentación Financiera Detallada. Según esta, cuando el valor total de un contrato excede de 50.000 euros por año "se llevará a cabo un proceso de selección a menos que lo excepcione el Secretario General de acuerdo con el artículo VI.35b".

Vozpópuli trató la pasada semana de que la OMT ampliara y explicara el contenido del último informe de auditoría del organismo, y en particular si la contratación de Ana Botella -alcaldesa de la capital entre diciembre de 2011 y junio de 2015- ha pasado por un proceso de selección o ha sido designada directamente por Taleb Rifai, pero no se ha obtenido respuesta.

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