Funnydent encargaba lavar el material de ortodoncia a la señora de la limpieza

Mientras el dueño de las clínicas Funnydent, Cristóbal López Vivar, duerme en prisión sin fianza por un presunto delito de estafa, continúan saliendo a la luz las peculiares prácticas de la empresa. "En Alcalá de Henares, la dirección de Funnydent ordenaba a la señora de la limpieza lavar el material que después se usaba en la ortodoncia de los pacientes. Sobra decir que esto descarta el limpiado aséptico en bolsas herméticas que precisan estos instrumentos", explica una fuente cercana a la clínica de Alcalá de Henares (Madrid) al diario Crónica Global, que cerró a finales de enero junto con las ocho franquicias restantes de la firma quebrada.

Los afectados por la insolvencia temen que pueda haber más casos de "escasa higiene" en otros puntos de atención. De hecho, los clientes atrapados por la quiebra repentina avisan de un reportaje en televisión en el que saldrán más casos de "protocolos higiniénicos deficientes" en las clínicas dentales. Entre otros, podrían estar afectados por estas prácticas los centros de Móstoles, Leganés o Alcorcón.

Ante esta situación, las decenas de clientes afectados por la espantada de la compañía de Cristóbal López ya se están organizando. En Alcalá organizarán una charla con un odontólogo en dos semanas para cerciorarse de que las intervenciones y ortodoncias realizadas por Funnydent cumplen con los requisitos médicos exigibles.

Gastaba mucho en márketing

La localidad barcelonesa de Sabadell, en la que estaba ubicada otra de las clínicas de la firma, vive la misma situación. Los pacientes del espacio ya han recibido la visita de un representante del Colegio de Odontólogos, con el fin de descartar daños o actuaciones poco profesionales.

"Hasta el momento, parece que las ortodoncias son correctas. Funnydent gastaba mucho en márketing. No sabemos cuánto invertía en limpieza, pero la impresión no era mala. Los expertos dirán", abunda una de las pacientes afectadas de la localidad catalana.

Las clínicas Funnydent cerraron abruptamente el pasado 28 de enero en toda la península por quiebra. El dueño de los centros (siete en Madrid y dos en Barcelona), Cristóbal López Vivar, se encuentra en prisión provisional acusado de un delito de estafa.