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Así funciona por dentro un cártel empresarial español

Las grandes firmas españolas de papel y cartón ondulado han alineado sus tarifas durante más de una década.

“El dinero huele bien, venga de donde venga”, Décimo Junio Juvenal, poeta romano.

¿Cómo funciona por dentro un cártel empresarial? 18 compañías del sector papelero y cartonero español han sido multadas por la CNMC por haber creado una organización de fijación de precios y reparto de mercado. La mayor de estas empresas, con casi 1.000 millones de euros en facturación, es la multinacional Saica. Lo que sigue son escenas reales que plasman el funcionamiento del cártel, recopiladas por Vozpópuli en entrevistas con informantes del sector del papel en España.

ESCENA 1, “Déjame que te explique cómo funciona esto”.

Alto ejecutivo de la empresa española líder en el sector, Saica. A su lado, uno de sus comerciales. Salen de reunirse con un cliente al que han llevado una serie de ofertas de productos.

- Vaya – le dice el joven, aún inexperto, a su jefe- No ha salido muy bien la reunión, sólo dos de los 10 contratos a los que aspirábamos.

- ¡Qué va! Ha salido perfecto. Creo que hay algo que aún no te han contado. Déjame que te explique cómo funciona esto…

El ejecutivo comienza a relatar al atónito empleado que, en realidad, la decisión de la empresa estaba pactada. Lo que tenía que ocurrir, lo que se había acordado previamente con los competidores, es que Saica se llevaba la venta de dos de los diez productos, y el resto las otras empresas del cártel.

En España, el mercado de venta de papel y cartón ha estado sometido a un enorme grupo de fijación de precios y de pactos de no agresión, según confirma tanto el expediente de la CNMV, que adelantó Vozpópuli, como distintas fuentes del sector.

ESCENA 2, “Seguro que han sido mis primos, que son unos torpes”.

“Alfonso Lantero hijo, ‘Alfonsito’, era el cerebro detrás de las ‘mesas regionales’ [reuniones entre distintas empresas del sector para actuar en colusión]”, explica a este reportero un ex trabajador de su empresa, Microlan. Al principio todo funcionaba bien. Se tomaban las precauciones adecuadas, como llevar a las reuniones un ordenador portátil y llaves USB para cada participante, para no intercambiar documentos por e-mail, utilizando los servidores corporativos. Pero poco a poco, con el paso de los años y “ante la sensación de impunidad”, empezaron a ser menos precavidos: se mandaban los precios a fijar por e-mail, por ejemplo. En esto llegó un chivatazo y la CNMC empezó, en enero de 2013, una investigación que incluyó registros y la incautación de los ordenadores con información comprometida.

“’¡Seguro que han sido mis primos, que son unos torpes!’, fue la conclusión de Alfonsito, Consejero delegado de Microlán, sobre sus familiares responsables de Lantero”, explica la fuente. El intercambio de correos entre Lantero y Saica es una de las primeras pruebas obtenidas por la CNMC para destapar el cártel.

ESCENA 3, Salir por la puerta de atrás.

Las reuniones de las empresas (Saica, Saica Pack, Papelera del Ebro, Lantero, Europac, Smurfit, entre otras) se realizaban normalmente en restaurantes de lujo. El problema de esos sitios, sobre todo cuando están en ciudades de provincia, es que son muy concurridos, y normalmente por el mismo tipo de gente. En uno de ellos se encontraban tres proveedores de varias de las empresas implicadas pactando los precios a los que iban a vender el cartón ondulado a sus clientes. En esto llegó, precisamente, un alto ejecutivo de una de las compañías a las que, al pactar, iban a engañar. “Tuvieron que salir por la puerta de atrás para que no les vieran juntos”, asegura un informante.

ESCENA 4, “Saica era el ‘macho alfa’”.

En todo el “tinglado” hay una ciudad destacada. Medinaceli, provincia de Soria, fue el lugar elegido para varias reuniones clave, la primera en 2001 y la segunda en 2004. En los siguientes años de ajuste del cártel los participantes se referirían frecuentemente al “espíritu de Medinaceli” para tratar de conciliar las disputas que iban surgiendo. Fue entonces cuando se creó el sistema de “mesas regionales”, reuniones en grandes salas con los principales actores del mundo del papel y cartón. “Siempre Saica era la primera en hablar, en dar un precio; era el ‘macho alfa’ [la empresa aragonesa y sus filiales controlan el grueso del mercado español]”, explican a este diario, algo que concuerda con el expediente de la CNMC. Luego el resto iban presentando sus propuestas, intereses e información relevante.

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