Quantcast

Economía

El Gobierno recortará la retribución de las eléctricas para abaratar la luz

Los accionistas han castigado a Endesa con una caída del 5,3%. Iberdrola y Acciona han cedido por su parte un 2,3% después de que Moncloa anuncie una reducción de los llamados 'windfall profits'

Las principales organizaciones de consumidores del país ven "inasumible" para los ciudadanos una nueva subida de la luz

Las eléctricas han arrancado la semana con un contratiempo. El Gobierno planea reducir los denominados 'windfall profits' de algunas tecnologías del 'mix' energético, como la hidráulica y la nuclear, que tienen una sobreretribución en el sistema. El Ejecutivo pretende este mismo martes en el Consejo de Ministros poner en marcha una normativa que cierre el grifo de esta compensación a las compañías. 

Una propuesta que ha tenido un impacto directo en la cotización de las grandes eléctricas. Endesa, Iberdrola y Acciona han liderado este lunes las caídas del Ibex 35, con retrocesos que han llegado a superar el 5%. El resto de las grandes energéticas, como Repsol o Naturgy, han cerrado con leves caídas del 0,2% . Los accionistas castigan principalmente a las eléctricas después de conocerse las intenciones de Moncloa con estas compañías.

La ministra de Economía, Nadia Calviño, aseguraba a primera hora de la mañana, en una entrevista concedida a ‘Herrera en Cope', que ya trabajan en un proyecto de ley "que en principio va mañana al Consejo de Ministros justamente para tratar de evitar que esta subida del coste de CO2 repercuta negativamente en el coste de la energía para los ciudadanos y las empresas", aunque no ha dado detalles sobre su contenido.

Según ha explicado la ministra, el precio de las emisiones de carbono ha aumentado "muchísimo" en los mercados, asegurando que actualmente está en torno a 50 dólares o euros la tonelada de CO2 cuando se pensaba que este nivel se iba a alcanzar dentro de unos años y no hay perspectiva de que se vaya a bajar en el corto plazo.

Calviño explica en la entrevista que este escenario sube a corto plazo el coste de la energía. Esta situación ha provocado la reacción del Gobierno. Su objetivo es tratar de evitar que la subida del coste del CO2 repercuta negativamente en el coste de la energía para los ciudadanos y las empresas. No hay que olvidar que el mes de abril los costes de estas emisiones han llevado a la factura de la luz a cifras de récord.

'Beneficios caídos del cielo'

Pocas horas después fuentes gubernamentales han detallado a las principales agencias que este anteproyecto de ley persigue reducir la retribución de las centrales eléctricas no emisoras de CO2 (hidráulicas y nucleares) anteriores a 2005 con el objetivo de recortar lo que se conocen como 'beneficios caídos del cielo' ('windfall profits') que supuestamente se llevan tecnologías "baratas", como la hidráulica o la nuclear, al ser remuneradas como las más caras (ciclo combinados) debido a que en el mercado mayorista de la luz los precios se fijan mediante un sistema marginalista. 

La propuesta pretende desarrollar un mecanismo de minoración de parte del dividendo de carbono a las plantas no emisoras previas a 2005 que vendan energía en el mercado. Según han explicado fuentes de Transición Ecológica a las agencias, el Gobierno quiere así compensar el impacto que está teniendo en el precio de la electricidad el alza de los precios del CO2 y posibles consecuencias que esto pudiera tener en la recuperación de las economías domésticas e industrial.

Un cambio en el sistema

Según recoge EFE, desde el ministerio destacan que "incluso cuando sólo el 9% de la electricidad en el mercado es de origen fósil, el sistema marginalista (por normativa europea) hace que ese sobrecoste, de la tecnología que marca el precio en cada momento, sea retribuido por igual a todas las tecnologías inframarginales no emisoras".

No obstante, el ministerio que dirige Teresa Ribera también señala que la propuesta se plantea con el máximo respeto al marco normativo europeo y la seguridad jurídica (sentencias europeas avalan mecanismos similares) y con las expectativas legítimas de los inversores que tomaron sus decisiones de inversión en tecnologías no emisoras con posterioridad a la entrada en vigor del sistema europeo de derechos de emisión (2005). "La propuesta no afecta, por tanto, a ninguna planta posterior a 2005, ni a las que cuenten con retribución regulada, ni a las que se acogen a las subastas ni a ninguna iniciativa de inversión presente o futura", han insistido.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.