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Economía

"Cortes de luz, baches, olor fecal…" La 'cara B' de Cerler, el paraíso de los Pirineos

Vecinos del pequeño núcleo oscense denuncian el "abandono" de los servicios básicos de la urbanización principal, que dependen de una de las empresas del Grupo Aramón

Cerler
Contenedor de basura desbordado en Cerler, Benasque (Huesca). Asociación Pico Sarllé

Los vecinos de Cerler, la pequeña localidad del pirineo aragonés, están "hartos". Llevan años denunciando el "abandono" de sus servicios básicos. Primero, lo intentaron "por las buenas", pero ahora han decidido dar un paso más al no ver avances tras sus reclamaciones. La gota que ha colmado el vaso ha sido el reciente anuncio de una inyección millonaria de fondos europeos para el tendido de la telecabina entre Benasque y Cerler y la inversión para ampliar la estación de esquí. "Para Cerler no hay nada", denuncian.

Cerler es uno de los tres núcleos de población de Benasque, un municipio enclavado en el corazón del pirineo aragonés. La pequeña Cerler se divide, a su vez, en dos partes: el casco antiguo, que depende del Ayuntamiento de Benasque; y la "urbanización", que acoge a unos 200 residentes fijos.

Para comprender el origen del conflicto hay que remontarse a la década de los 60, cuando comenzó a gestarse la construcción de la urbanización. En esos años, se elaboró el plan parcial para levantar los edificios. El desarrollo de las obras lo llevaron a cabo diferentes sociedades, según explica a Vozpópuli el alcalde de Benasque, José Ignacio Abadías. El alcalde reconoce que las "quejas" por el "déficit" de servicios básicos han sido continuadas. Tampoco se han construido todas las viviendas que se proyectaron inicialmente.

Cerler
Deficiencias en el mobiliario urbano denunciadas por la Asociación Pico Sarllé.

Desde hace unos años, el responsable de la urbanización es la misma empresa que gestiona la estación de esquí de Cerler, Fomento y Desarrollo del Valle de Benasque, S.A., una de las sociedades del Grupo Aramón. Hace dos años -explica el alcalde-, Aramón planteó un convenio para desarrollar la urbanización en tres etapas. El Ayuntamiento le dio el visto bueno. En teoría, los trabajos en la urbanización se contemplan en las dos primeras fases. Pero los vecinos, a través de la Asociación Pico Sarllé, denuncian que siguen con los mismos problemas de siempre.

La lista de deficiencias enumerada por la asociación vecinal es larga. "Esta zona está completamente abandonada de la mano de dios", se queja su presidente, Lucas Damlaimcourt. "Las aceras están sin terminar, hay farolas sin luz, otras están tumbadas o con los cristales rotos, el asfaltado está lleno de baches y con bocas de alcantarillado que sobresalen del suelo. Hay problemas con los malos olores porque el sistema de alcantarillado es de fibrocemento, hay fisuras y pérdidas de aguas fecales. También hay problemas de seguridad: sólo hay dos tomas de agua para los bomberos y ninguna de ellas funciona", explica.

Damlaimcourt también reprocha el mal estado de la depuración del agua y la "frecuencia insuficiente" del sistema de recogida de basuras. Alerta de que en Cerler hay contenedores "desbordados" y "olor fecal" en determinadas zonas durante la temporada alta. El presidente de la asociación cree que a los turistas que acuden a la localidad "no les gustará" ver "contenedores reventados", "basuras esparcidas" y "cortes de luz y de agua". El colectivo vecinal ha decidido dar un "paso más" al difundir la situación de Cerler en los medios de comunicación. El Heraldo de Aragón ha recogido esta semana la opinión de tres empresas turísticas de Cerler que comparten las críticas sobre la dejación de la urbanización.

No pedimos la luna ni aceras de mármol, pedimos servicios básicos", reclaman los vecinos de Cerler. El alcalde de Benasque les da la razón y responsabiliza al Grupo Aramon

Los vecinos reclaman que se priorice la ejecución de la primera fase de la urbanización y critican que el Grupo Aramón y el Ayuntamiento se echen "mutuamente la culpa". "No pedimos la luna ni aceras de mármol, pedimos servicios básicos: luz en las calles, que cuando se estropeen las farolas nos las reparen…", señala Damlaimcourt.

El alcalde señala que "la asociación tiene toda la razón del mundo porque tiene unos servicios deficitarios", pero insiste en que el desarrollo de la urbanización depende del holding. "La asociación está presionando al Ayuntamiento para que Aramón ejecute las obras, pero no podemos poner dinero público en una urbanización privada. Podemos instar a cumplir las etapas de su proyecto de urbanización y constantemente, lo hacemos", asegura el regidor.

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