En vilo ante el sorpresivo anuncio de Pedro Sánchez. El poder económico enciende las alarmas por la incertidumbre ante la posible dimisión del presidente del Gobierno y los distintos escenarios que se abren paso, como el de una cuestión de confianza. “Es insólito. Se añade más incertidumbre a una situación política de por sí inestable”, coinciden distintas fuentes financieras consultadas por Vozpópuli.
El inesperado movimiento de Sánchez se dejó sentir ayer en el ánimo inversor en Bolsa. El Ibex 35 ignoró en un primer momento los planes del presidente del Gobierno, pero al final se dio la vuelta y acabó cerrando con una caída del 0,40%, lastrado además por los malos datos económicos en Estados Unidos.
Algunas empresas con influencia del Estado, como Indra o Naturgy, en plena opa conjunta de Criteria y Abu Dabi, cayeron más que el selectivo, con pérdidas del 1,42% y del 2,26%, respectivamente.
"La prensa internacional se hizo eco de la posible dimisión de Sánchez por la investigación sobre su esposa, Begoña Gómez.
Entre algunos fondos de inversión advierten de que la imagen del presidente del Gobierno “queda tocada” tras el eco del anuncio en la prensa internacional. Algunos medios como Financial Times, The Washington Post o Le Monde recogían ayer la noticia de que Sánchez se plantea dimitir tras la decisión de un juez de abrir diligencias para investigar a su esposa, Begoña Gómez. Tan sólo 24 horas después del anuncio de “reflexión” de Sánchez la Fiscalía pidió archivar estas diligencias.
Mala imagen fuera de España
“Haga lo que haga Sánchez saldrá muy desprestigiado de esta situación. Fuera de España está corriendo como la pólvora que se plantea dimitir por un escándalo de corrupción que afecta a su esposa”, advierten fuentes próximas a la City de Londres, desde donde se canalizan la mayoría de las inversiones hacia Europa.
La incertidumbre hasta el lunes, cuando el presidente tiene previsto comunicar su decisión, se puede agravar si finalmente presenta su dimisión o ahonda en un periodo de incertidumbre con una cuestión de confianza o la convocatoria de otras elecciones generales, que en ningún caso serían antes del 21 de julio.
“La incertidumbre política puede tener efectos económicos sobre el crecimiento”, lleva meses repitiendo el actual gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, a quien el Gobierno tiene que sustituir antes del 11 de junio.
“El nervioso de los inversores iría a más si la decisión de Sánchez tiene impacto en las elecciones en Cataluña del 12 de mayo”, expone un alto cargo de una de las principales consultoras internacionales, que mantiene contacto permanente con los grandes fondos de inversión.
Incógnitas abiertas
Dependiendo del camino que decida tomar el presidente del Gobierno, entre los inversores pesan dos incógnitas: la sucesión en el Banco de España y convertir el impuesto al sector bancario en permanente. En el primer caso, en el que el Gobierno ya ha dado el pistoletazo oficial y maneja varios nombres, casi cualquier salida que plantee Sánchez afectaría al nombramiento del nuevo gobernador, como señalan fuentes próximas al Banco de España.
Una situación similar a lo que ocurrió con la elección de Pablo Hernández de Cos en 2018, cuando el Gobierno de Mariano Rajoy le nombró gobernador a sólo 48 horas de la moción de censura contra el presidente en ese momento. El mandato de Hernández de Cos es de seis años no renovables y expira el 11 de junio.
“La incertidumbre política puede tener efectos económicos sobre el crecimiento”, lleva meses advirtiendo precisamente el actual gobernador. Sobre todo, tras la renuncia del Gobierno a presentar unos Presupuestas Generales para este mismo ejercicio.
