Economía

Unicaja se encomienda a su núcleo duro de accionistas para disuadir la amenaza de opa hostil

La cúpula se resigna a retener la sexta posición en el ránking por tamaño y sólo explorará alianzas de negocios.

  • Una oficina de Unicaja

Unicaja estará en el punto de mira triunfe o fracase el asalto de BBVA al Sabadell. Cada vez hay más voces en el sector bancario que apuntan a otra ronda de fusiones, pero en el banco andaluz se aferran a su núcleo duro de accionistas para disuadir cualquier amenaza de opa hostil. Cualquier movimiento deberá pasar por el filtro de la Fundación Unicaja, que controla un 30,2% del capital, y que hará “imposible” cualquier intento de compra sin acuerdo, como dejan claro fuentes próximas a la entidad.

Hay algunos de los grandes accionistas de Unicaja que se abren en privado a estudiar posibles ofertas, como publicó este medio, pero la cúpula del banco andaluz siente el respaldo del núcleo duro, conformado por la Fundación, el empresario Tomás Olivo (con más del 9%), los dueños de Mayoral (con más del 8% del capital) y la aseguradora Santalucía, que afloró algo más de un 5% tras el cese del consejero delegado procedente de Liberbank.

Las integraciones de por sí son complicadas. En un ambiente hostil imagino que tiene que ser más"

Un blindaje que obliga a los potenciales interesados a sentarse a negociar. “Tenemos plena confianza de nuestros accionistas”, afirma Isidro Rubiales, consejero delegado de Unicaja. La cúpula “no teme” un asalto inesperado y se centrará en buscar la rentabilidad para devolver la confianza a sus inversores. De hecho, aspira a ganar 1.600 millones de euros hasta 2027 y repartir el 85% de su beneficio para seducir a su base de accionistas.

Recuperar negocio

Este será el principal objetivo del plan estratégico que presentó la entidad ayer para los próximos tres años. La hoja de ruta en solitario pasa por recuperar la cuota en hipotecas del 6% que precisamente perdió la entidad tras su fusión con Liberbank en 2021 y los efectos de la lucha de poder. En este sentido, la cúpula lanzó un mensaje para navegantes: “Las integraciones de por sí son complicadas. En un ambiente hostil imagino que tiene que ser más”, advirtió el consejero delegado de Unicaja.

En el periodo, el equipo directivo prevé alcanzar una ratio de solvencia de máxima calidad del 14%, por encima del mínimo de referencia del 12,5%. Esta ‘hucha’ no se utilizará tampoco para lanzarse a comprar otras entidades, sino más bien para potenciar alianzas en segmentos de negocio por explotar. Estos son los casos de la banca de empresas y de los planes de pensiones y fondos de inversión.

Gonzalo Gortázar.

Unicaja también pondrá el foco en el crédito al consumo, con un aumento estimado del 2%, y en el negocio de seguros, con un incremento del 25% al año de primas. Y el equipo directivo confía en que el saldo de crédito deje de caer por el impulso de las formalizaciones de préstamos a empresas. El stock de crédito disminuyó un 4% al cierre de 2024, frente a la caída del 8% que venía sufriendo en anteriores ejercicios.

Unicaja salió del top five por tamaño tras la lucha de poder al integrar Liberbank

Una de las claves será la de intentar aprovechar la opa de BBVA al Sabadell y la pérdida de negocio que puedan sufrir ambas entidades. “Estamos abiertos al mercado, a todas las oportunidades”, ambicionó Rubiales.

Amenazas latentes

CaixaBank sorprendió la semana pasada al apuntar que en España aún hay margen para mayor consolidación bancaria, en medio de la disputa entre el Sabadell y BBVA, con Moncloa presionando en contra de la opa precisamente por razones de competencia. Y ayer mismo, ING  admitió que estudia compras para crecer en España, como dijo Steven van Rijswijk, el consejero delegado del grupo neerlandés.  

"Queremos crecer en mercados más grandes, incluidos Italia, España y Alemania. Las fusiones y adquisiciones son una opción en todas partes, si se ajustan a nuestros criterios", afirmó Van Rijswijk en el Foro de Davos, según Reuters.

Unicaja se resigna a conservar el sexto puesto en el ránking de bancos más grandes de España. Ha logrado frenar la pérdida de negocio tras la batalla de poder al fusionar Liberbank y se mantiene estable en los 97.000 millones de activos. Y tratará de seducir tanto a sus grandes accionistas como a los pequeños inversores con más dividendo: incluso sopesa usar la hucha de capital para pagar uno extraordinario.

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