La aventura de Eurona en el sector satelital ha llegado a su fin. La compañía, el principal socio de Hispasat -propiedad de Redeia, antigua red eléctrica- para revender sus conexiones de Internet vía satélite en pueblos y lugares remotos de España, Irlanda, Marruecos e Italia, ha vendido todas sus filiales.
En el caso de España, Irlanda y Marruecos, la operación de venta ya ha sido cerrada, mientras que la de Italia está a punto de concretarse, tal y como ha podido saber en exclusiva Vozpópuli, tras consultar fuentes de total solvencia.
Los equipos de Starlink son muy fiables, con una gran redundancia y sencillos de instalar. Apenas se rompen y se configuran de una manera muy simple. Hasta no hace mucho Hispasat no tenía competencia, pero el sector está cambiando mucho y rápidamente. Musk está reventando el mercado"
De momento se desconoce quién o quiénes son los compradores del negocio -tampoco el montante-, pero sí se saben los motivos. El principal de ellos es la escasa rentabilidad del negocio, en gran medida debido a los altos precios que supone operar en los territorios rurales y también a la entrada de Starlink, fundada por Elon Musk. Estos factores empujaron a la dirección de la compañía a poner en venta Eurona hace unos meses, operación que ya se ha concretado. En 2023 la empresa facturó un total de 23 millones de euros, pero arrojó pérdidas por valor de 5 millones.
La realidad es que la llegada de Starlink ha comprimido mucho los márgenes y las empresas dedicadas a distribuir este tipo de conexiones han visto reducidos considerablemente los ingresos. Elon Musk ha sembrado los cielos de todo el mundo con 3.000 nanosatélites que ofrecen voz y datos en cualquier punto del mundo, teniendo además redundancia en caso de que se produzcan problemas técnicos.
Todo el tiempo que pase sin que la operación se concrete es malo para Redeia, dado que el sector va a seguir comprimiéndose con la llegada de Amazon y la expansión imparable de Starlink, que contraerán aún más la facturación de Hispasat y, por tanto, reducirá su valor de mercado
Un escenario de la alta competitividad que no va a mejorar, sobre todo con Amazon anunciando también la intención de lanzar su negocio de Internet rural a través de satélites, denominado Kuiper.
En cuanto a los trabajadores de Eurona, de los 50 que conforman la empresa en España la mita se quedará con la empresa que ha comprado Eurona. En el caso de Marruecos, con 25 personas, e Irlanda, con 15 trabajadores, sus plantillas pasarán íntegramente a la empresa adquiriente.
La fiabilidad, factor clave en Starlink
El servicio satelital de Elon Musk, Starlink, está siendo una sorpresa para propios y extraños. A pesar de que ha tenido que bajar los precios en varias ocasiones desde su lanzamiento para competir con las ayudas estatales lanzadas para contratar servicios con Hispasat, lo cierto es que las empresas que lo prueban repiten, en detrimento de los servicios ofrecidos por otras corporaciones, como es el caso de la gestora satelital española.
"Los equipos de Starlink son muy fiables, con una gran redundancia y sencillos de instalar. Apenas se rompen y se configuran de una manera muy simple. Hasta no hace mucho Hispasat no tenía competencia, pero el sector está cambiando mucho y rápidamente. Musk está reventando el mercado", explican fuentes del sector a este diario. Se da la circunstancia de que Eurona también comercializaba conexiones satelitales de Starlink.
Una situación que no beneficia a Hispasat, metida de lleno en una operación de venta a Indra que se gesta desde hace meses pero acaba de concretarse. Como en este tipo de acuerdos, los problemas para su cierre son económicos. Indra ha puesto sobre la mesa 800 millones de euros por el negocio, pero Redeia, la dueña de Hispasat pagó en noviembre de 2019 más de 933 millones de euros por el 89% del gestor de satélites, entonces propiedad de Abertis, motivo por el que ve esta cantidad insuficiente. Todo el tiempo que pase sin que la operación se concrete es malo para Redeia, dado que el sector va a seguir comprimiéndose con la llegada de Amazon y la expansión imparable de Starlink, que contraerán aún más la facturación de Hispasat y, por tanto, reducirá su valor de mercado.