Macroeconomía

El Gobierno eleva al 2,6% el crecimiento del PIB pero recorta las expectativas sobre la inversión

A diferencia del consumo privado y sobre todo público, la inversión no despega. El Gobierno recorta del 5,8% al 4,5% su previsión de crecimiento para este año

El Gobierno ha aprobado este martes en Consejo de Ministros un nuevo cuadro macroeconómico cuyos grandes números se resumen en un crecimiento más intenso de lo previsto hasta el momento. El Producto Interior Bruto (PIB) avanzará un 2,6%, por encima de las grandes economías europeas y pese al contexto internacional. El crecimiento se sostendrá, según el Ejecutivo, en el consumo privado, la inversión y el consumo público. Pero la revisión ya recorta las expectativas sobre el crecimiento de la inversión y eleva el peso del consumo.

El consumo privado sorprendió al alza en 2024 y su contribución al crecimiento del PIB fue clave, aportando prácticamente la mitad. El PIB creció un 3,2%, el doble de lo que plantearon a inicios del año los analistas y muy por encima de la media de la Unión Europea (0,8%). Las proyecciones del Gobierno asumen que este año volverá a ser el principal motor del crecimiento económico, con un avance del 2,8%. La inmigración, los salarios y el empleo son los factores que están detrás.

La segunda variable que más contribuirá al PIB será la inversión. A diferencia del consumo, ésta no termina aún de despegar, pero el Gobierno confía en que este año lo hará, con un crecimiento del 4,5%. Sin embargo, en las anteriores previsiones el crecimiento esperado este año era del 5,8%. Además, los economistas temen que una "guerra psicológica" entre EEUU y la UE con amenazas de imposición de aranceles genere un entorno de incertidumbre y desconfianza que debilite aún más la inversión empresarial, el componente del PIB más rezagado. 

En lo que respecta al consumo público, mantendrá un peso relevante en el crecimiento económico del país. Los cálculos del Ejecutivo apuntan a un avance anual del 2,6%, un punto más de lo que esperaban en las anteriores previsiones. En 2024 ya aportó alrededor de uno de los 3,2 puntos de crecimiento. Y en los últimos seis años, desde que Pedro Sánchez llegó a la Moncloa, ha explicado 4,2 puntos de los 8,9 que ha crecido el PIB, según cálculos de Funcas.

En cuanto a la tasa de paro, eleva una décima su previsión: antes esperaba que cerrara el 2025 en el 10,3% y ahora la sitúa en el 10,4%. En cualquier caso, previsiblemente será una de las tasas más bajas desde 2008 (comparativa histórica) pero se mantendrá aún como el país de la Unión Europea con peor dato en la actualidad (comparativa internacional). Respecto al empleo, espera que se generen un millón de puestos de trabajo entre 2025 y 2026, hasta superar los 23 millones de ocupados.

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