En los últimos años, la situación del alquiler en España se ha vuelto insostenible. Miles de inquilinos salen a las calles a quejarse por el nivel de los precios que, aunque parezca mentira, ya se han vuelto la norma. Problemas como el auge de los pisos turísticos y la falta de oferta han hecho que en ciudades como Barcelona el metro cuadrado supere los 23 euros, siendo esta la ciudad más cara del país. Y este no es el único problema: la inventiva se dispara entre los caseros que buscan anular el contrato de alquiler.
Poner en valor los problemas a los que también se enfrentan los propietarios de las viviendas es igual de importante que dar visibilidad a los arrendatarios, pero no todos los solventan de igual manera. Así, en algunos casos al arrendador le interesa no renovar el contrato de alquiler y recuperar su vivienda antes de lo esperado, pero es necesario saber que esto está sujeto a ciertas condiciones específicas.
La excusa de los caseros
Plantear a un inquilino la necesidad de recuperar la vivienda no es sencillo, ya que conlleva varias implicaciones. La noticia debe darse con tiempo suficiente para que este pueda buscar un lugar al que desplazarse -tarea nada sencilla en el momento que atraviesa España-, además de justificar la noticia. Para ello, un argumento se ha extendido notablemente en los últimos tiempos: "mi hijo se casa". Además, ante la posible negativa del inquilino o dificultades para encontrar un hogar, algunos tratan de subir el precio de las mensualidades como 'condición' para acceder a extender el alquiler.
Para todos aquellos inquilinos que se hayan visto en esta situación -o que quieran protegerse frente a esta posibilidad-, la información normativa y legal es valiosa. Lo cierto es que, si el contrato ha sido firmado después del 6 de marzo de 2019, "para poder recuperar la vivienda debe haber transcurrido el plazo mínimo de duración del contrato". Así lo explica una corredería de seguros especializada en aspectos inmobiliarios.
Además de esto, los profesionales apuntan que el propietario de la vivienda está obligado a demostrar, de forma fehaciente, la necesidad de siponer de la vivienda para uso propio o familiares directos, como sus hijos. Es en este momento en el que el recurrido argumento se hace efectivo. El anuncio debe hacerse al menos cuatro meses antes de la fecha establecida, y el inquilino deberá abandonar la casa en el plazo indicado, siempre que este sea superior a dos meses.
Renovación del contrato
Finalmente, es importante conocer los posibles motivos por los que el arrendador puede decidir no renovar el contrato de alquiler con su actual inquilino. El incumplimiento grave del documento es uno de los posibles motivos. Los términos incumplidos pueden ser varios: desde el impago de la renta de forma reiterada hasta haber causado graves daños a la vivienda o causar molestias a los vecinos. Además, necesitar realizar reformas en la vivienda que impidan su uso normal es otra causa que permite al propietario evitar renovar el acuerdo.