El nuevo ciclo del aceite de oliva ya ha comenzado. De hecho, el mercado lleva meses presenciando la nueva etapa de estabilización de precios de un producto que en los últimos años ha superado, por mucho, sus máximos históricos. El precio del aceite en origen ya acumula más de dos meses consecutivos de bajada y, según queda reflejado en los datos del ministerio de Agricultura, el origen este 'oro líquido' ya está un 55% más barato que hace justo un año.
La cartera de agricultura publica semanalmente el boletín de precios del aceite de oliva. En ellos, se analiza en profundidadla situación de este producto. Desde la semana 39 de la campaña, que se corresponde con la semana del 23 al 29 de septiembre de 2024, el precio ha caído sin descanso, excepto tres semanas puntuales sueltas donde se produjeron pequeñas subidas.
La última semana de la que se tienen datos, ya que se publican con una quincena de decalaje, es la cuarta de este año, del 20 al 26 de enero. Los 100 kilogramos de aceite de oliva costaron 381,89 euros, 18,73 menos que la anterior semana (-4,67%). Con respecto al inicio de la campaña, la semana 40 de 2024, ha caído ya un 44,9%.
El aceite lleva dos meses encadenando caídas de precios. El consumidor lo celebra, pero los productores temen que una caída tan brusca afecte a la rentabilidad
Pero la diferencia con respecto a la misma semana del año pasado es aún mayor, ya que desde entonces ha caído un 54,7%; en aquella semana, según consta en los registros oficiales, los 100 kilos de aceite costaban 842,65 euros. En apenas un año, esta cantidad de aceite cuesta casi 500 euros menos. Una caída que también preocupa a los productores porque supone un cambio demasiado brusco que puede quebrar la rentabilidad.
La caída más significativa se ha producido en el aceite de oliva refinado, pues su precio ha disminuido 6,34% de una semana a otra. Sin embargo, interanualmente la caída más fuerte es la de oliva lampante, con caídas del 57,90%.
¿Por qué la caída no se nota en el súper?
Como demuestran los datos, la caída de precios ha sido muy significativa en origen, algo que ya habían avisado los productores que sucedería tras las buenas cosechas de este verano.
Pero la realidad es que esta nueva etapa todavía no se ve reflejada en los precios de los súper. Según un estudio de FACUA, donde se ha analizado el precio del coste de una botella de aceite de oliva de un litro en hasta seis supermercados, se ha llegado a la conclusión de que el precio en el súper ha bajado en un 24% en el último año, frente a más del 50% que se ha reducido en el precio en origen.
Según sus cálculos traducidos a euros, la botella de litro de aceite ha bajado de unos 12,88 euros a 9,79. En origen ha bajado en más de 4 euros mientras que en el supermercado la reducción de inferior: 3,09 euros.
Según explican los expertos, que el consumidor no haya notado aún la drástica bajada de precios en el aceite de oliva se explica porque todavía estamos consumiendo aceite de campañas anteriores. Hasta que no se realicen nuevas adquisiciones por parte de las cadenas de alimentación, el bolsillo del consumidor no notará este gran desplome en el precio del aceite de oliva.