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Economía

La tripulación de Ryanair acude a la huelga sin esperanza: “El siguiente paso es hacer un paro al mes”

El consejero delegado de Ryanair, Michael O'Leary

Este viernes las huelgas volverán a los aeropuertos de la mano de Ryanair. Los tripulantes de cabina (TCP)  de la compañía irlandesa acudirán a su segunda huelga en menos de tres meses. Es decir, el paro mediático que realizó la tripulación a finales de julio no surgió efecto. La tensión entre empresa y trabajadores continúa. 

Su principal reclamación es que Ryanair regule a sus trabajadores bajo la legislación española. Pero este escenario sigue sin producirse y no tiene pinta que vaya a cambiar. "Hemos valorado con el resto de sindicatos de los diferentes países que el siguiente paso es convocar un paro al mes, si esta segunda huelga no surge efecto", destaca el responsable de Vuelo de Unión Sindical Obrera (USO) Sector Aéreo, Ernesto Iglesias.

Las reuniones entre trabajadores y la empresa muestran que las posiciones siguen muy separadas. "En los encuentros que hemos tenido esta semana, Ryanair reitera que no aplicará partes de la legislación española, algo que es un escollo insalvable. Podría ser perfectamente salvable si la aplicaran, como hacen el resto de compañías", destaca el representante sindical. 

Ernesto Iglesias indica que con respecto a julio existen mejoras, como son las promesas de mejoras laborales dentro de dos años y un respaldo público por parte de la Comisión Europea."Las palabras de la comisaria de Empleo y Asuntos Sociales, Marianne Thyssen, son un avance importante para nuestra causa", ha añadido el representante sindical. 

Thyssen aseguró en una reunión este mismo miércoles al consejero delegado de Ryanair, Michael O'Leary, que el respetar las leyes en materia laboral "no es algo que los trabajadores debieran tener que negociar" y ha exigido a la aerolínea de bajo coste "pleno cumplimiento" de las normas comunitarias. "Esperamos que estas palabras supongan un impulso en el proceso de negociación", señalan desde el sindicato.

Ryanair reitera que no aplicará partes de la legislación española, algo que es un escollo insalvable

La huelga, que también respaldan los trabajadores de Bélgica, Holanda, Portugal, Italia y Alemania, es también una manera de reclamar al Ministerio de Trabajo que tenga un mayor protagonismo en este conflicto entre la empresa irlandesa y los trabajadores españoles. "Se han limitado a reclamar a Ryanair que acepte las directrices a la hora de aplicar la legislación laboral española, pero no consideramos que sea suficiente como representantes gubernamentales del país", indica Iglesias.  

Ryanair ve un boicot de su competencia

Ryanair, por un lado, indica en un comunicado que negociará "exhaustivamente" acuerdos con sus pilotos y tripulantes de cabina (TCP). No obstante, culpa a otras aerolíneas de la convocatoria de las últimas huelgas.

En el caso de España, donde la empresa vivirá el próximo viernes una nueva movilización, la "low cost" asegura que han sido los TCP de Norwegian en Alicante los que han impulsado las protestas."No conocemos ninguna otra empresa multinacional en Europa en la que los empleados de la competencia interfieran con sus negociaciones sindicales", señala la aerolínea.

De hecho, la compañía de bajo coste ha solicitado una investigación a la Comisión Europea sobre el comportamiento "anticompetitivo" de determinadas organizaciones sindicales. "Este es un intento ilegal de distorsionar la competencia y la elección del cliente, en beneficio de las aerolíneas tradicionales", añade. 

150 vuelos afectados este viernes

El impacto de la huelga de este viernes en Europa sigue rondando el 8% de los vuelos programados, 150 vuelos, lo que implica que el grueso de los 2.400 trayectos no sufrirán cambios a priori. En un primer momento esta cifra se había situado en 190.

En España, el Ministerio de Fomento ha decretado en los servicios mínimos que Ryanair tendrá que garantizar el 100% de los vuelos con los territorios no peninsulares y el 59% de los servicios domésticos sin alternativas de transporte inferiores a 5 horas, así como los internacionales, y el 35% en el resto de las operaciones.

Aunque existe una última esperanza. Este mismo jueves la Dirección General de Trabajo ha citado nuevamente a los sindicatos convocantes de la huelga, USO y Sticpla, y a la dirección de la compañía a una reunión un día antes de las movilizaciones. Pero los sindicatos ven pocas posibilidades de que se produzca el milagro. 

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