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Economía

Telefónica reconoce que el conflicto entre Huawei y EEUU puede retrasar su red 5G

José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica

Donald Trump ha anunciado un nuevo plazo de 90 días durante los cuales las empresas norteamericanas podrán seguir haciendo negocios con la multinacional china Huawei, tras expirar la anterior moratoria, también de tres meses de duración.

Telefónica ha reflejado en sus cuentas trimestrales el peso que la guerra comercial puede tener en el devenir de sus proyectos a corto y medio plazo.

El operador comandado por José María Álvarez-Pallete considera que el conflicto podría retrasar su despliegue de redes 5G. El operador tiene previsto que su red 5G esté preparada para dar servicio comercial en determinadas zonas durante el verano -a más tardar antes de finales de año-, aunque de momento no hay fecha para el lanzamiento de tarifas.

La compañía de telecomunicaciones explica que su red de proveedores para infraestructuras está compuesta por diez empresas, que podrían verse afectadas por la guerra comercial, con las correspondientes consecuencias en el despliegue

"En este sentido, la posible adopción de medidas proteccionistas en ciertas partes del mundo, incluyendo las derivadas del resultado de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, podría afectar de forma negativa sobre algunos de los proveedores de Telefónica y otros operadores del sector. La imposición de restricciones al comercio puede resultar en costes más altos y márgenes inferiores y podría afectar de forma negativa a los negocios del Grupo", reconoce la compañía en el documento publicado en la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores).

La compañía de telecomunicaciones explica que su red de proveedores para infraestructuras está compuesta por diez empresas, que podrían verse afectadas por la guerra comercial, con las correspondientes consecuencias.

"Si los proveedores no pudiesen suministrar sus productos al Grupo Telefónica en el plazo acordado o tales productos y servicios no cumplen con los requerimientos del Grupo, podrían comprometer los planes de despliegue y expansión de la red, lo que en determinados supuestos podría llegar a afectar al cumplimiento de los términos y condiciones de los títulos bajo los que opera el Grupo Telefónica, o comprometer los negocios y los resultados operativos del Grupo Telefónica", detalla Telefónica.

Subida de precios

Una situación que podría suponer, además, el encarecimiento del coste de los servicios contratados por el operador con estos proveedores. Telefónica también hace referencia al problema de las patentes, también presente en la guerra comercial entre Estados Unidos y China.

"Estos proveedores pueden, entre otras cosas, extender los plazos de entrega, subir los precios y limitar el
suministro debido a la falta de stock y a requerimientos del negocio o por otras razones. Además, los proveedores en los que se apoya Telefónica también pueden estar sujetos a litigios asociados con la tecnología de la que depende Telefónica, incluyendo litigios relacionados con reclamaciones e infracción de patentes. Tales reclamaciones se realizan con frecuencia en la industria de las comunicaciones", desgrana la compañía.

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