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Economía

La inversión española en México cae un 37% con López Obrador de presidente

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, asumió el cargo el pasado 1 de diciembre

Durante el primer semestre del año, el primero completo de Andrés Manuel López Obrador como presidente, la economía mexicana se ha estancado y la inversión española en México se ha reducido un 37% con respecto al año anterior. Las empresas de capital español invirtieron 2.009 millones de dólares en ese país en los primeros seis meses de 2019, frente a los 3.154 millones del mismo periodo en 2018, según los últimos datos oficiales del Gobierno mexicano. En el último lustro, solo en 2016 la inversión española en México había sido inferior al dato del primer semestre de este año. 

"Lo que nos preocupa y ocupa es que el gobierno reactive dos sectores fundamentales: la energía, especialmente el sector eléctrico y las renovables, y el sector de las infraestructuras", señala en entrevista con Vozpópuli Antonio Basagoiti, presidente de la Cámara Española de Comercio en México (CAMESCOM). "La falta de concreción de proyectos en esos dos sectores, que son muy importantes para las empresas de capital español, hacen que la inversión baje", añade para explicar una de las causas que han provocado la disminución de la inversión española en ese país. 

El ex político del PP, que desde 2014 trabaja como Director Ejecutivo para Grandes Empresas de Santander México, asegura que las empresas españolas mantienen una "confianza moderada" y un "prudente optimismo" sobre el futuro de la economía mexicana, a pesar de que se encuentra al borde de la recesión técnica tras el primer semestre completo de mandato del izquierdista López Obrador. En el segundo trimestre de 2019, su PIB tuvo un crecimiento nulo, 0%, después de haberse contraído un -0,2% en los primeros tres meses del año. 

"Austeridad republicana"

Como parte de su "austeridad republicana" y su cruzada contra la corrupción, López Obrador mantiene paralizados proyectos de infraestructuras, mientras en el sector energético ha congelado las subastas de energía eléctrica y de gas previstas. Consecuencia directa, según el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la patronal mexicana, de que la inversión privada, tanto extranjera como nacional, haya caído un 6% durante el último año.

A pesar de lo negativo de los datos, el sector privado y las empresas españolas se mantienen a la espera de que el Gobierno mexicano anuncie en los próximos meses un paquete de estímulos con el que intentará conseguir el crecimiento del 2% del PIB que López Obrador se ha fijado como objetivo, frente al 0,9% previsto por el FMI para 2019.

Las empresas españolas mantienen una "confianza moderada" y un "prudente optimismo" sobre el futuro de la economía mexicana, a pesar de que se encuentra al borde de la recesión técnica

"Si el gobierno apuesta por el sector energético y las infraestructuras, tendremos cifras de inversión mucho mejores. Confiamos que se detone un cambio de políticas en estos dos campos durante el segundo trimestre del año", precisa el presidente de CAMESCOM, organismo que agrupa a casi 700 empresas de capital español en México.

En referencia a los temores iniciales y la incertidumbre jurídica que generó la llegada de López Obrador a la presidencia, Basagoiti señala que el clima actual es de una mayor tranquilidad y pide esperar a que el presidente mexicano cumpla un año en el Gobierno antes de poder hacer un balance más preciso de las perspectivas para las empresas españolas en eses país. 

"Las inversiones se están respetando. No hay ningún temor ahora en este sentido. El Gobierno de López Obrador está adoptando políticas bastante serias en materia de Hacienda, control del Déficit y respeto a la inversión. No hay ninguna desconfianza en ese apartado. Las empresas españolas estamos tranquilas y lo único que esperamos es que se aclaren las políticas y estrategias a seguir para que la economía mexicana siga creciendo".

Ataques de López Obrador a empresas españolas

Sobre las acusaciones veladas de López Obrador a empresas españolas por su papel en presuntos casos de corrupción, Basagoiti dice que "las actitudes poco éticas no son propias de las empresas españolas". "Estas prácticas son propias de algunas empresas específicas, independientemente de su nacionalidad. No es justo señalar a las empresas españolas, que somos absolutamente defensoras de las políticas anticorrupción que plantea el actual gobierno de México". 

El presidente de la Cámara Española de Comercio en México descarta rotundamente que se pueda producir un repliegue total de las inversiones españoles en ese país

Asimismo, el presidente de CAMESCOM da por zanjada la polémica suscitada por la carta que el presidente mexicano envió al Rey Felipe VI para exigir una disculpa pública por la conquista, pero sí reconoce cierto grado de sorpresa cuando se produjo esa reivindicación. "Fue raro porque a los españoles y mexicanos nos unen muchas cuestiones. Sonó extraña, pero está prácticamente olvidada porque no se ha vuelto a sacar el tema por parte del Gobierno mexicano". 

Además de la falta de claridad en materia energética y de infraestructuras, Basagoiti señala otra razón de la caída de la inversión española en México: "Las empresas españolas llevamos mucho tiempo en este país, y sabemos que en los cambios de sexenio, cuando se produce un cambio de Gobierno, siempre suele haber cierta ralentización. No es una cuestión que no estuviera prevista. La confianza moderada en el país se sigue manteniendo". Como ejemplo, recuerda que también durante el primer año de gobierno del ex presidente Enrique Peña Nieto hubo una disminución de la inversión española en México.

Descarta un repliegue de la inversión española

El presidente de la Cámara Española de Comercio en México descarta rotundamente que se pueda producir un repliegue total de las inversiones españoles en ese país. Como ejemplo recuerda los recientes compromisos de inversión adquiridos en el sector financiero mexicano por BBVA y Santander, cuyos máximos responsables, Carlos Torres y Ana Botín, visitaron en meses recientes a López Obrador para mostrar su compromiso en ese país

Además, Iberdrola anunció en mayo que invertirá 4.500 millones de euros en México durante los próximos seis años, Repsol prevé invertir casi 400 millones de euros hasta 2022 y Cepsa tienen intención de irrumpir en el mercado mexicano con la apertura de 150 estaciones de servicio en los próximos dos años.

"Se descarta un repliegue total. Ahora bien, en el momento en que se detonen más políticas y estratégicas en los sectores de energía, infraestructuras e incluso seguridad, la inversión podrá ser aún mayor". "México para nosotros es como un tren que está en marcha, la máquina puede ir un poco más rápido o un poco más despacio, pero el tren no se puede parar. Otra cosa es que quien esté al frente de la máquina decida acelerar o no un poco más", concluye Basagoiti.

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