Las lagunas en el plan del Gobierno siembran el caos: El Corte Inglés se prepara para abrir desde el 11

El plan de desescalada presentado este martes por el Gobierno de Pedro Sánchez presenta lagunas e indefiniciones en el ámbito del comercio, cuyas empresas no tienen del todo claro todavía ni cuándo tienen que abrir ni con qué condiciones de seguridad. El caso de El Corte Inglés es uno de los más llamativos. Considerando que está en la categoría de grandes almacenes, la norma que ha dado a conocer hasta ahora el Ejecutivo no deja claro cuándo podría abrir esta compañía, si a mediados de mayo, como el resto del comercio a pie de calle, o ya en junio.

En este sentido, en la fase 1 del plan del Gobierno, a partir del día 11 de mayo, se procederá a la "apertura generalizada de los locales y establecimientos comerciales que no tengan carácter de centro o parque comercial", explica el Ejecutivo en los documentos que explican el plan. Estas aperturas, no obstante, se harán con un aforo limitado al 30% y, además, se garantizará una distancia mínima de dos metros entre clientes. Asimismo, sigue el Ejecutivo, se establecerá un horario de atención preferente para personas mayores de 65 años.

El Corte Inglés, que no se considera a sí mismo centro comercial -estos abrirían en la fase 2, ya en junio-, pretende poder abrir sus puertas junto al resto del comercio a pie de calle; es decir, a partir del día 11. Hasta ahora, los grandes almacenes tenían abierta la parte de supermercado, pero consideran que, con las medidas de seguridad ya implantadas (mamparas, mascarillas, control diario de temperatura) y con sus protocolos internos activados, podría abrir sus puertas en la primera tanda.

Las lagunas en lo anunciado hasta este momento por el Gobierno hacen posible que, por ejemplo, la tienda de Zara del madrileño Paseo de la Castellana pueda abrir sus 4.000 metros cuadrados -siempre con el control de aforo señalado-, pero todavía quede la incógnita de qué va a pasar con los centros de El Corte Inglés.

En esta misma línea, se da el caso de que compañías como Ikea, que tienen dos tiendas en el centro de Madrid, o Leroy Merlin, con otras dos tiendas urbanas en Madrid y Barcelona, podrán abrir estos centros pero, en teoría y según lo anunciado hasta hoy, no los que están ubicados en los parques comerciales, que son su mayoría. Lo mismo pasaría con Decathlon (que cuenta con sus tiendas City).

Piden abrir cuanto antes

En este sentido, el Gobierno de Sánchez no ha especificado, como se comentaba en el sector, ningún máximo de metros cuadrados para realizar las aperturas de estos locales, por lo que, si la norma no se modifica, podrían ser todos los que están ubicados en las ciudades.

La patronal que engloba a compañías como Ikea o El Corte Inglés, Anged, no esperaba este miércoles a que el Ejecutivo definiera los términos con claridad y reseñaba que las razones sanitarias y de seguridad de empleados y clientes "deben ser los únicos motivos que determinen la reapertura" de los establecimientos comerciales.

Para Anged, todas las tiendas que cumplan los requisitos necesarios de distanciamiento social, aforo, prevención e higiene requeridos por la autoridad sanitaria deberían poder abrir sus puertas en la fase 1. "El plan ya recoge una serie de límites de aforo en las tiendas y de distanciamiento que perfectamente pueden garantizar nuestras empresas, que llevan semanas trabajando en esta vuelta segura de clientes y empleados. No existen, por tanto, motivos para su exclusión", insiste.

"Sólo nuestras empresas, que llevan más de seis semanas cerradas, tienen en estos momentos en torno a 100.000 empleados en proceso de ERTE y de la reapertura de tiendas depende la vuelta a la actividad de miles de proveedores (seguridad, limpieza, logística, servicios profesionales) y empresas industriales, en su mayoría pymes", alega la patronal.

Los centros comerciales, en junio

Con todo, y a la espera que que el Gobierno aclare qué ocurre en casos como el de El Corte Inglés, la norma señala que no será hasta la fase 2, en junio, cuando se produzca la apertura al público de los centros o parques comerciales, prohibiendo la permanencia en las zonas comunes o áreas recreativas.

En esta línea, se establecerá un aforo limitado al 40% y, como en el resto de las tiendas, se deberá garantizar una distancia mínima de 2 metros distancia entre
clientes. También habrá un periodo de atención preferente a mayores de 65 años.

Asimismo, el Ejecutivo de Sánchez tiene todavía pendiente dar a conocer su guía definitiva de buenas prácticas para el sector comercial, en la que detallará cuáles son las medidas que los locales y sus trabajadores deberán implementar para una apertura segura en la que el riesgo a la expansión del coronavirus no se incremente. En el borrador de esta guía, adelantado por este periódico, el Gobierno sugería que los trabajadores se midieran la temperatura antes de salir de casa, que los probadores estuvieran cerrados o abiertos parcialmente, entre otras.