Fotocasa alerta del colapso de la vivienda: "La compraventa caerá un 60% o más"

Fotocasa, reconocido portal inmobiliario, proyecta que la compraventa de viviendas podría caer en ritmos de "un 60% o más" interanual a partir del actual mes de marzo, dada la crisis generada por el coronavirus.

"Para 2020 pronosticábamos que iba a ir muy en línea con 2019 aunque claramente estos pronósticos se van a ver truncados con la crisis económica que estamos viviendo debido a la paralización de la económica a raíz del Coronavirus, que hará que durante meses el número de compraventas baje con fuerza", avanza Ismael Kardoudi, director de Estudios y Formación de Fotocasa.

"En febrero es posible que aún veamos datos similares a los de 2019 pero a partir de marzo y durante los meses siguientes el número de compraventas va a bajar con fuerza y es posible que veamos caídas del 60% o más, en el número de compraventas respecto a 2019. Nos enfrentamos a una crisis económica que paralizará durante meses el sector pero que esperamos que después la actividad vuelva a los datos similares a los que habíamos tenido durante 2019", añade Kardoudi.

Caída de 4.700 millones en hipotecas 

La proyección de Fotocasa coincide con la realizada por la Agencia Negociadora de Productos Bancarios. Esta última ha augurado una caída de al menos el 60% de las firmas de hipotecas en abril y mayo respecto a 2019. Un frenazo equivalente a unos 4.700 millones de euros.

"Al cabo del actual mes de marzo veremos también un impacto pero, a la luz de lo que ha pasado hasta ahora, entendemos que el impacto mayor se dará en abril y mayo. Proyectamos una caída de al menos el 60% de la firma de hipotecas respecto al año pasado y entendemos de hecho que, ahora, es una proyección muy prudente. Preferimos pecar de estimar a la baja", han asegurado a este periódico desde la Agencia Negociadora tras conocer el decreto de estado de alarma rubricado este fin de semana por el Gobierno.

Desde la misma, al igual que ahora lo hacen desde Fotocasa, muestran su preocupación por los efectos que puedan tener el parón del coronavirus en un sector con los plazos y la inercia del inmobiliario, que ya había entrado en una fase de ralentización.