Publicado: 17/01/2019 16:01
El fantasma del caso Abengoa perseguirá durante, al menos, todo este año a los antiguos miembros del consejo de administración de la compañía, entre ellos el actual Ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno prosigue con la investigación del presunto delito de falsedad contable contra los que fueran los dos principales ejecutivos del grupo energético hasta su entrada en preconcurso de acreedores, en septiembre de 2015, el expresidente Felipe Benjumea y el exconsejero delegado Manuel Sánchez Ortega.
La Plataforma de Perjudicados por Abengoa presentó querella contra ambos en 2016, por delito societario y delito de falsedad en mercados financieros. La multinacional sevillana comunicó en 2015 un beneficio de 72 millones, en el primer semestre de ese año, y poco después solicitó su entrada en preconcurso.
Borrell ganó dos millones de euros como consejero de Abengoa entre los años 2010 y 2016
El grupo estuvo a punto de protagonizar la mayor quiebra empresarial ocurrida en España, con una deuda superior a los 9.000 millones de euros, pero logró firmar una refinanciación con la mayoría de sus acreedores y evitar la declaración de concurso.
Aunque la querella afecta de momento a Benjumea y Sánchez Ortega, fuentes cercanas a los querellantes indican que, dependiendo de como avance la investigación, la querella podría ampliarse al resto de los consejeros de la energética andaluza, incluyendo a Josep Borrell.
Consejero independiente
Josep Borrell accedió al consejo de administración de Abengoa en el año 2010, y se mantuvo en el mismo hasta 2016.
De acuerdo a los informes anuales de Gobierno Corporativo y de remuneraciones de Abengoa, Borrell cobró cada ejercicio, entre 2010 y 2015, 300.000 euros. De esa cantidad, 200.000 euros correspondían a dietas por asistencia a los consejos y retribución como consejero; y 100.000 euros como salario por su presencia en comisiones del consejo de administración.
El ICO, Cofides, ICEX y Bankia perdieron cientos de millones con la crisis de la multinacional energética
El Ministro presentó su dimisión al puesto en noviembre de 2016, cuando el grupo se encontraba ultimando un acuerdo con los acreedores para evitar el concurso. En total, Josep Borrell percibió 1,98 millones de euros como consejero de Abengoa entre 2010 y 2016.
Borrell, siendo consejero de Abengoa, vendió 10.000 acciones de la compañía por 9.030 euros el 24 de noviembre de 2015. La operación se realizó un día antes de que la multinacional sevillana anunciara su entrada en preconcurso de acreedores, y su valor en Bolsa se hundiera.
La venta de esos títulos fue detectada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores, que impuso una multa el pasado mes de noviembre a Borrell de 30.000 euros, al sostener que este disponía de información privilegiada, habiendo cometido una "infracción muy grave".
Abogacía del Estado
El juez Ismael Moreno confirmó mediante auto fechado el pasado 21 de noviembre la personación del Estado en el proceso, al ser parte perjudicada en la crisis de Abengoa.
Organismos públicos como el ICEX, Cofides y el ICO, y también Bankia, perdieron cientos de millones de euros en la caída de Abengoa.
Felipe Benjumea y sus socios en la compañía reclaman 1.000 millones a Santander y HSBC
Las fuentes consultadas consideran que la investigación de la Audiencia Nacional sobre el presunto delito de falsedad contable se alargará durante todo este año, a la espera de que se analicen pruebas periciales que ocupan decenas de miles de documentos.
La Plataforma de Perjudicados de Abengoa ha solicitado al juez que se incorpore a la causa las pruebas que se presenten en otro proceso judicial abierto en Madrid.
El Juzgado de Primera Instancia número 43 de Madrid admitió a trámite el pasado mes de noviembre demanda presentada por Felipe Benjumea y sus socios en Abengoa contra Santander y HSBC, a los que reclama 1.000 millones de euros.
El expresidente de Abengoa culpa a Santander de haber dejado caer a la compañía al negarse a participar en una ampliación de capital que hubiese dado un respiro al grupo poco antes de presentar preconcurso de acreedores.
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