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Pallete se decanta por no vender O2 y prepara un nuevo plan de desinversiones

José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica.

La decisión está casi tomada. José María Álvarez-Pallete, flamante nuevo presidente de Telefónica, está convencido de que Telefónica puede seguir manteniendo bajo su paraguas a su valiosa y rentable filial móvil británica O2 y a la vez cumplir con sus compromisos de recortar su abultada deuda, que ya supera los 50.000 millones de euros, y mantener el dividendo.

Según las fuentes cercanas al presidente consultadas por Vozpópuli, el grupo O2 seguirá en manos de Telefónica, una vez sondeadas las ofertas no firmes de operadores de telecos y fondos de inversión internacionales. Pallete y su equipo tienen claro que en estos momentos sería casi imposible conseguir los 13.000 millones de euros que Hutchison se comprometió a pagar por la filial móvil cuando selló su acuerdo con la multinacional española en marzo de 2015.

Bruselas tumbó la operación porque violaba las normas comunitarias de competencia y no tardaron en aparecer posibles compradores, desde las telecos Liberty, Talk Talk o Illiad a los fondos CVC, KKR y Apax Partners, entre otros. Sus ofertas tentativas no están ni por asomo a la altura de la de Hutchison, así que desde Telefónica se quiere pasar página al episodio de venta de O2 y trabajar ya en qué activos desinvertir para ingresar entre 10.000 y 15.000 millones de euros, que irán destinados a recortar deuda.

O2 se quedará como la principal pata europea de la teleco española, que quiere reforzar el papel institucional y estratégico de la sede londinense

O2 se quedará como la principal pata europea de la teleco española. Pallete quiere reforzar el papel institucional y estratégico que supone contar con una segunda sede europea en Londres, desde la que se goza de un escaparate internacional importante, según los analistas.

El equipo de Pallete diseña el nuevo plan de desinversiones que tiene en Telxius, la filial de infraestructuras de telefonía móvil, su primer y quizá más valioso activo. Visto el éxito de la salida a Bolsa, competidor de Telxius controlado por el grupo Abertis, Telefónica quiere sondear el mercado para hacer lo propio con su recién creada filial.

Los analistas piensan que el grupo podría arañar entre 5.000 y 6.000 millones de euros en una OPV de Telxius, aunque todo dependerá de qué porción del pastel está dispuesta a desprenderse la multinacional.

Cobra cada vez más fuerza el lanzamiento de una emisión de bonos híbridos o convertibles, si los mercados consolidan su estabilidad y el petróleo deja de dar sustos (se afianza en los 50 dólares el barril).

Sólo la OPV de Telxius podría reportar entre 5.000 y 6.000 millones de euros al grupo

También analiza Telefónica la posible salida a bolsa de la filial mexicana así como colocar un paquete minoritario de la propia O2 en el mercado británico, extremo éste que está en una fase muy inicial de estudio.

También podría desprenderse de su pequeña participación en China Unicom o recortar su autocartera, que ahora asciende al 1,5% del capital de la operadora.

Con todos estos mimbres, Pallete quiere presentarse ante los mercados financieros con el cumplimiento de los objetivos de recorte de deuda, sin tocar el dividendo comprometido (0,75 euros brutos en 2015, que representan una rentabilidad del 7,9% a precios actuales) y manteniendo bajo su control al gigante británico.

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