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Las filiales británicas de Santander y Sabadell, frente a un nuevo test de estrés con el Brexit de fondo

Ana Botín, presidenta de Banco Santander.

Las filiales británicas de Banco Santander y Banco Sabadell se han enfrentado a nuevos test de estrés, llevados a cabo por la Autoridad Regularia Prudencial (PRA), dependiente del Banco de Inglaterra. Fuentes próximas a las entidades (Santander UK y TSB) han explicado a Vozpópuli que las pruebas de resistencia de este año son una suerte de continuación de las pruebas llevadas a cabo a finales del pasado año, y que ambas aprobaron sin complicaciones. Los stress test, según fuentes conocedoras de las mismas, "se conocieron y presentaron a finales de mayo", a pocas semanas de que se celebre el referéndum sobre el Brexit.

Tal y como explica la propia PRA, las pruebas de resistencia de este año someterán a los bancos británicos a tres tipos distintos de estrés: por un lado un escenario macreconómico estresado para los próximos cinco años; por otro un escenario de fuerte deterioro del comercio exterior y del riesgo y por último un escenario en el que se prevén fuertes costes relacionados con problemas de conducta (mala comercialización de productos, incumplimientos normativos...). "Se hace para conocer más detalles sobre los escenarios ya comunicados por el Banco de Inglaterra en los últimos test de estrés", explican desde Santander.

Este nuevo test se hace "para conocer más detalles sobre los escenarios ya comunicados por el BoE en los anteriores"

Pese a que la PRA no publicará de momento los resultados de las pruebas de resistencia, las dos entidades españolas dan por hecho que han aprobado las mismas. En el caso de Santander UK, la filial británica pasó sin problemas los test de estrés de 2014 ("que se centró sobre todo en precios de la vivienda") y de 2015, que por su parte se centró más en los problemas de los mercados asiáticos y su posible influencia en la banca de Reino Unido. Precisamente este último test afectó por ello especialmente a dos gigantes como HSBC y Standard Chartered, con gran presencia en China y buena parte de Asia.

En TSB dan por descontado también que el banco (séptimo de Reino Unido) ha pasado las pruebas con nota. Y es que la posición de capital de la entidad, después de que el BoE rescatase a Lloyd's y posteriormente le vendiese a Sabadell su filial cubierta de capital público, es más que holgada. A más problemas, sin embargo, se pueden enfrentar, según fuentes financieras consultadas por este diario, otros bancos extranjeros, debido a la particular distinción que hace el supervisor británico en función de la estructura corporativa de cada entidad.

Penalización a la banca sin filiales

El Banco de Inglaterra y la PRA penalizan especialmente a aquellos bancos que no funcionen con la estructura de ring fence, aquella que separa por completo las distintas compañías y divisiones de negocio de la entidad, de manera que funcionan de forma autónoma e independiente. "El supervisor está penalizando menos a los bancos que están sujetos al modelo ring fence, ya que tienen sus balances dentro de Reino Unido", lo que beneficiaría a los bancos españoles con filiales británicas, según explican fuentes conocedoras de estas pruebas de resistencia. Por contra, bancos globales como por ejemplo BNP Paribas, con otro modelo de funcionamiento más dependiente de la entidad matriz, se verían más perjudicadas en estos test de resistencia.

¿Por qué opta el BoE por premiar a los bancos con modelos de filiales autónomas? Fuentes consultadas por este diario explican que así el supervisor británico se garantiza un ámbito de actuación controlado y ceñido lo más posible a su territorio. En el caso de TSB, por ejemplo, aunque a efectos contables se consolida filial en las cuentas de Banco Sabadell, a todos los efectos de solvencia y funcionamiento actúa como una entidad independiente, por lo que funciona de acuerdo con los requerimientos del ring fence. Algo similar ocurre con Santander UK, que aunque cuelga de la matriz Banco Santander opera como un banco autónomo, del que a su vez se descuelgan dos filiales, una para negocio minorista y otra para banca corporativa.

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