El 'smartwatch', al asalto de las marcas de lujo: sus ventas superan ya a los relojes analógicos

Llevar un Rolex, un Longines, un Cartier o un Omega siempre ha representado un símbolo de distinción y buen gusto en la muñeca de una persona. Pero el siglo XXI se caracteriza por ser la era tecnológica por excelencia, y las personas que pueden permitirse el lujo de pagar como mínimo 6.000 euros, e incluso llegar a los 50.000 euros en algunos modelos por adornar su brazo con el paso del tiempo, no quieren renunciar a las facilidades que ofrecen los denominados 'smartwatches'.

Las ventas de smartwaches superaron en casi un millón de unidades a los analógicos durante el último trimestre del año pasado.

Durante las ferias de relojería más importantes que se celebran a principios de año en Suiza ha quedado patente que los clientes buscan exclusividad pero sin dejar a un lado la tecnología y la conexión a internet. Durante BaselWorld, de Basilea, se conocieron los últimos datos de ventas de relojes inteligentes y han superado de manera abrumadora a las marcas tradicionales. Según la firma especializada Strategy Analytics, las ventas de smartwaches superaron en casi un millón de unidades a los analógicos durante el último trimestre del año pasado. Una cifra que no sería demasiado abultada si no fuera porque las unidades de relojes inteligentes vendidas crecieron un 315% respecto al mismo período de 2014.

Este dato ha puesto de manifiesto que los clientes buscan la exclusividad al mismo tiempo que seguir conectados. No obstante, las marcas tradicionales del lujo, como Audemars Piguet, Jaeger LeCoultre, IWC Schaffhausen, Rolex u Omega, siguen presentando sus modelos en eventos del sector, como la clásica SIHH de Ginebra.

Los clientes que buscan exclusividad en sus relojes pueden encontrar en este salón los últimos diseños, aunque no hace falta acudir a estos eventos para tenerlos a mano. Existen tiendas digitales especializadas como Chrono24, dónde los entusiastas del lujo pueden localizar los relojes más exclusivos a un golpe de click. Son marcas como Omega o Cartier las que siguen apasionando a los coleccionistas y a quienes les gusta disfrutar de modelos únicos para ver el paso del tiempo.

Pero también se están llegando a acuerdos con determinadas marcas de lujo para crear modelos 'inteligentes', ya sea para el sistema operativo Android o para Apple. Incluso marcas como Michael Kors apuestan por crear sus propios diseños, que son intercambiables con la mayoría de marcas de relojes. Todo por no quedarse atrás en los gustos de los clientes que han encontrado en Apple y Samsung a sus aliados tecnológicos.

En un momento en que internet se ha convertido en el centro de atención de los consumidores, desde los que practican running hasta los seguidores de los mercados financieros. Las marcas ya están poniendo remedio a esta brecha digital, desarrollando algunos modelos analógicos con ciertas funcionalidades, como alarmas y notificaciones.