Publicado: 09/06/2016 04:00
La ‘operación Chamartín’ está un poco más cerca de acabar en los tribunales. La segunda reunión entre las tres Administraciones y Distrito Castellana Norte (DCN, la promotora del desarrollo urbanístico, participada mayoritariamente por BBVA) terminó sin un mínimo viso de avance en las negociaciones pero, además, sin que el Ministerio de Fomento, la Comunidad de Madrid y la compañía pudieran saber con exactitud los argumentos por los que el Ayuntamiento tumbó definitivamente el plan que hacía posible el proyecto, algo en lo que se insistió mucho durante las más de dos horas de reunión. La cuestión no es baladí porque es el elemento que falta para que Fomento y DCN acaben de tomar la decisión de acudir a los tribunales para resolver por la vía jurídica un asunto que se complica cada vez más por la vía política.
En el caso de Fomento, la amenaza de acudir a la Justicia ya está sobre la mesa, concretamente a través de una carta dirigida al Consistorio en la que advertía sobre la posible exigencia de compensaciones por los más de 700 millones de euros
En el caso de Fomento, la amenaza de acudir a la Justicia ya está sobre la mesa, concretamente a través de una carta dirigida al Consistorio en la que advertía sobre la posible exigencia de compensaciones por los más de 700 millones de euros invertidos en llevar el AVE hasta la estación de Chamartín y su adecuación en un hub para la alta velocidad ferroviaria.
De forma más prudente ha actuado hasta ahora DCN. La promotora ha hecho llegar al Ayuntamiento de Madrid en los últimos meses hasta cinco escritos con preguntas sobre la tramitación del plan parcial que permitía iniciar el desarrollo sin haber obtenido respuesta alguna. El equipo encabezado por la alcaldesa, Manuela Carmena, se reservó para dar la contestación definitiva el pasado 25 de mayo, con la denegación de dicho plan por parte del pleno municipal.
Ahora, la única duda suscitada en el seno de DCN es conocer los motivos que han llevado al Consistorio a tomar esta decisión. “Una vez recibida dicha notificación, DCN analizará las opciones disponibles, sin descartar ninguna alternativa en defensa de sus intereses”, señaló la promotora al término del encuentro. Por su parte, la ministra de Fomento en funciones, Ana Pastor, preguntó con insistencia a Carmena los motivos del Ayuntamiento para tumbar el plan. En estos momentos, es uno de los secretos mejor guardados y así seguirá al menos durante las próximas semanas.
Inmovilismo
Y todo porque las argumentaciones jurídicas del Ayuntamiento servirán de base para que tanto Fomento como DCN acudan a los tribunales para reclamar los posibles daños ocasionados por la decisión del Consistorio. Las dudas de que ésta tenga una base normativa sólida son muchas en cualquiera de los casos. Pero no podrán iniciar un proceso judicial sin contar con la respuesta de la corporación municipal. A partir de entonces, los equipos jurídicos se pondrán en marcha. Es una simple cuestión de tiempo.
El primer encuentro de este tipo, celebrado el pasado 20 de mayo, sirvió para constatar la diferencia entre las posturas y la poca o nula disposición de las partes a cambiarlas. La jugada se repitió en la tarde de este miércoles pero la paciencia se ha agotado un poco más.
El primer encuentro de este tipo, celebrado el pasado 20 de mayo, sirvió para constatar la diferencia entre las posturas y la poca o nula disposición de las partes a cambiarlas
Mientras, la Comunidad de Madrid no parece tan interesada en conocer los motivos del rechazo al desarrollo de DCN. Su papel en el futuro de la operación Chamartín es decisivo, toda vez que tendrá que decidir sobre el plan que presente el Ayuntamiento para su propia versión de la articulación urbanística de la zona norte de Madrid. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, aseguró que si la única alternativa es la del Ayuntamiento, los trámites administrativos para aprobarlo se demorarán durante más de tres años, confirmando así la información de Vozpópuli.
"Frustración". Esa fue la palabra empleada por Cifuentes tras la conclusión del encuentro de este miércoles. Eso sí, fue la única que habló de la posibilidad de “ceder” y de “negociar hasta donde haga falta” para sacar adelante el proyecto. Con el inicio de la campaña electoral, el tiempo para este tipo de reuniones se termina. Carmena fue la que más insistió en que un cambio de signo en el Gobierno central podría desatascar el desarrollo del norte de Madrid. Una posibilidad de la que el resto de los asistentes no quiso ni hablar.
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