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El pool acreedor de Pescanova elige a KPMG como auditor independiente para establecer el perímetro real de la deuda

Las 45 entidades financieras acreedoras de Pescanova han celebrado su segunda reunión, decidiendo tras la misma la contratación de la firma auditora KPMG para comenzar a trabajar contra el reloj, intentando delimitar el perímetro de la deuda de la compañía.

La pasada semana, Vozpópuli informó de que este pool intentaba buscar asesores independientes, después de su primera reunión en la sede de Deutsche Bank. Como banco de inversión, sonaba especialmente Rothschild, mientras que como auditor los candidatos eran KMPG y Deloitte. Finalmente, será la primera.

La contratación de un banco de negocios tendrá que esperar y no se descarta que se aplique en estas funciones el propio auditor. Pero lo primero es “ponerse a trabajar ya mismo en paralelo con la compañía y su auditor. Esperamos que esto sea posible, aunque hasta el momento, la cúpula de Pescanova no ha facilitado información”, afirman fuentes del comité delegado, formado por Banco Sabadell, La Caixa, Popular, Bankia, Deutsche Bank, RBS y Novagalicia.

Muy difícil

Estas fuentes señalan que la elección ha sido más complicada de lo esperado: “llegamos al fin de semana con la seguridad de que había que fichar a un auditor de los llamados big four (KPMG, Deloitte, Ernst & Young y PWC) y a un banco de inversión internacional especializado en este tipo de refinanciaciones, con todos los votos para Rothschild, pero el fin de semana ha sido un hervidero de llamadas hacia las cúpulas de Sabadell, Caixa, Deutsche Bank…”

Así, casi todo el mundo ha intentado entrar en una operación que puede ser una gran fuente de fees: “desde españolas como N+1 o Arcano, pasando por las entidades internacionales con sede en España y todos los grandes despachos legales mercantiles; todas han llamado ofreciendo sus servicios”, comentan las fuentes.

Por tanto, de momento entra KPMG, aunque no se descarta que en el futuro se contrate a un banco de inversión. Es una opción bastante probable: “de momento, todo lo peor se está cumpliendo. Apenas hay tiempo, por lo que todos los apoyos son vitales”.

Estas fuentes insisten en que desde la presentación del preconcurso de acreedores, se está perdiendo un tiempo precioso. “Hay un plazo de cuatro meses para levantarlo y ya casi se ha consumido uno, teniendo en cuenta que la semana que viene es Semana Santa”.

Los accionistas de referencia no involucrados en la ejecutiva, con Grupo Damm a la cabeza, denuncian que se enteraron de la situación de preconcurso con la publicación del Hecho Relevante. A partir de ahí, insistieron en un consejo extraordinario, que se celebró el pasado 14 de marzo. Dicha reunión se saldó con un cruce de comunicados en la CNMV, pero lo peor es que desde Pescanova señalan que no hay más consejos convocados fuera del cauce ordinario, a pesar de que Damm y Luxempart lo acaban de exigir por triple vía (burofax, acta notarial y correo electrónico), anunciando medidas legales en caso de que persista el silencio. 

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