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Jägermeister: el anestésico nazi que quiere desbancar al gintonic entre los jóvenes españoles

La forma ideal de consumo es tomarlo en chupito y muy frío (-20ºC), directamente del congelador.

Es la 1:00 horas de la madrugada y María Ferrer pide una ronda de chupitos de Jägermeister para ella y sus cuatro amigas en un local de Madrid. "Está de moda, es una forma rápida de emborracharte y más económica que beber varias copas", reconoce la joven madrileña. "Me gustan los gintonics, pero a veces tienen precios inaccesibles para los sueldos actuales", considera. Al otro lado de la barra, el camarero comenta que esta práctica se repite cada fin de semana entre decenas de grupos de jóvenes que, justo antes de desplazarse a cualquier discoteca, reclaman este licor alemán para no tener que gastar demasiado en las salas de baile, donde el precio de las copas, sin contar la que se incluye por la entrada al establecimiento, gira en torno a los 10 euros. "A partir de cierta hora cada vez piden más chupitos de Jägermeister y menos gintonics", señala. Un hábito de consumo que, posiblemente, se extienda al resto de ciudades de España.

"Está de moda, es una forma rápida de emborracharte y más económica que beber varias copas", reconoce una joven madrileña

De acuerdo a los datos publicados esta semana por la la Federación Española de Bebidas Espirituosas (FEBE), las empresas de bebidas espirituosas vendieron en España cerca de 190 millones de litros en 2015, lo que supone un incremento anual del 2,5 % y el primer año con datos positivos tras una década de caídas marcada por la crisis.

Es decir, tras diez años de "ley seca", los españoles comienzan a consumir destilados con mayor alegría. Según FEBE, el sector, que genera un volumen de negocio valorado en 7.585 millones de euros, "comienza a recuperarse" tras varios ejercicios de cifras negativas.

Moda en España

"Desde 2015, España está en el Top 5 de países en los que más Jägermeister se consume en el mundo", explican los responsables de esta firma en el mercado nacional. "Su consumo en nuestro mercado existe desde hace muchos años porque los alemanes lo demandaban en las zonas turísticas durante sus vacaciones desde hace décadas", explican. Sin embargo, puntualizan que el interés del público español por Jägermeister "a un nivel considerable" sí es más reciente: "Empieza hace menos de 10 años. Durante ese periodo de tiempo Jägermeister ha ido creciendo en popularidad de forma gradual y sostenida". 

"España está en el Top 5 de países en los que más Jägermeister se consume en el mundo", afirma la marca alemana

Para los encargados de la marca en España, el consumo es cada vez mayor porque, a pesar de su popularidad creciente, tiene todavía mucho recorrido por delante, tanto a nivel de distribución como de conocimiento por parte del público local.

"Se trata de una bebida con mucha historia, que lleva muchos años siendo elaborada de forma cuidadosa con la misma receta, con una botella e imagen que ha permanecido a lo largo de muchas décadas ajena a modas y tendencias y que hoy día salta a la vista como algo distinto", consideran. "Parece sacada de otra época, y es que realmente es así. Ha permanecido fiel a sí misma", indican.

Anestésico nazi

De hecho, este brebaje que actualmente "empinan" los codos de la juventud española tiene su origen en 1934, cuando su creador, el cazador Kurt Mast, quiso crear una bebida para su gremio. Fue ya en ese mismo momento, cuando el nombre Jägermeister -que en alemán significa maestro cazador- y la imagen del ciervo de San Huberto fueron registrados como marcas oficiales, y desde entonces se ha continuado elaborando exactamente según la receta original, y secreta, en el pueblo germano de Wolfenbüttel: un total de 56 tipos de hierbas forman parte de una bebida que atesora un 35% de contenido alcohólico

Durante la II Guerra Mundial, adquirió gran popularidad entre las tropas alemanas al ser utilizado como anestésico por su alta dosis de alcohol

Debido a su alta graduación alcohólica, este licor fue utilizado como remedio para la tos y para los problemas digestivos. Tanto es así que, durante la Segunda Guerra Mundial, adquirió gran popularidad entre las tropas alemanas al ser utilizado como anestésico y también como desinfectante. Actualmente, Jägermeister se sigue elaborando por MastJägermeister SE, empresa que ha permanecido desde su fundación en manos de la familia Mast.

A pesar de su reciente expansión por España, en consumo per cápita hay muchos otros países con consumos mayores. "Está dentro del Top 10 de bebidas premium internacionales más consumidas en el mundo", explican fuentes responsables de la marca.

Cabe señalar otra práctica asociada al consumo del "Jäger". Su mezcla con una bebida energética también está de moda. Se trata del chupito conocido como Jägerbomb, una fórmula que alcanzó popularidad en la década de los 90 en EEUU y cuyos sus efectos pueden ser imprevisibles para el organismo. Incluso, existe un grupo de Facebook llamado Asociación de Víctimas del Jägermeister cuya dosis de humor es equiparable a su graduación alcohólica.

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