El Gobierno alarga la venta de Hispasat e intenta convencer a Eutelsat para que participe

Se retrasa la operación Hispasat. Los planes del Ejecutivo, que pasaban por rubricar la cesión de la participación que le queda en el operador de satélites (aproximadamente un 25%), en estos días se han visto alterados por las reticencias surgidas a última hora en el seno de la compañía francesa Eutelsat, segundo accionista de Hispasat, y que iba a adquirir parte de las acciones que aún están en manos del Estado español.

Así, Moncloa tenía prácticamente cerrada una operación a tres bandas en la que los otros dos protagonistas serían los dos principales socios de Hispasat: la propia Eutelsat y Abertis, que actualmente y tras comprar a Telefónica una participación, controla algo más de un 40% del operador español de satélites. Como informó Vozpópuli, la presidenta de Hispasat, Elena Pisonero, había prácticamente cerrado la participación de Eutelsat en el proceso en Francia e incluso estaba todo previsto para su anuncio en el pasado consejo de ministros o, a mucho tardar, en el de este viernes.

Sin embargo, a última hora Eutelsat ha mostrado reticencias por el precio a pagar por las acciones de Hispasat. Con la operación, Abertis incrementaría su participación en el operador por encima del 50%, con lo que el Gobierno, por orden del Ministerio de Hacienda, introduciría una prima de control.

La negativa provisional de Eutelsat se basa en que la compañía gala considera que no debería pagar esa prima, que sólo Abertis debería hacerlo puesto que Eutelsat en ningún caso será el accionista mayoritario de la sociedad.

Fuentes del sector apuntan que, por el momento, Moncloa ha decidido apurar los plazos y darse un poco más de tiempo para tratar de cerrar la operación y que ésta incluya a Eutelsat. Las próximas semanas se intensificarán los contactos para liquidar una negociación en la que el Gobierno lleva trabajando durante más de un año.

Alternativa solo con Abertis

Así las cosas, la operación se ha quedado por el momento en el aire y no se descarta ni que Eutelsat recule y decida avenirse al acuerdo ni que su negativa sea definitiva. Para este segundo caso, el Ejecutivo cuenta con una alternativa que incluirá únicamente a Abertis y que, además, supondría no deshacerse de la totalidad del paquete accionarial que mantiene en Hispasat a través de tres sociedades públicas.

En el caso de que Eutelsat se descolgara definitivamente de la venta, el Gobierno tan sólo enajenaría la participación que mantiene a través del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), que asciende al 14,6%. El resto, en manos de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y del Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial (CDTI), seguiría en manos públicas esperando una mejor oportunidad.

Recientemente, Telefónica terminó su desinversión en Hispasat con la venta del 12% que mantenía a Abertis y Eutelsat, con lo que estas dos empresas se quedaron como los únicos socios privados de la compañía.