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Ferrovial guarda silencio sobre su presunta implicación en la financiación de CDC

“Sin comentarios”. Esta ha sido la reacción de Ferrovial ante la publicación en el diario El Mundo del borrador del informe de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía sobre una presunta trama de corrupción de Convergencia Democrática de Catalunya, la formación liderada por el presidente de la Generalitat y candidato de CiU a la relección, Artur Mas.

El documento sitúa a la constructora controlada por la familia Del Pino como una de las piezas del engranaje que permitía, siempre según la versión del informe, la financiación ilegal de la formación política a través del cobro de comisiones. El borrador señala que ya en los últimos tiempos de Jordi Pujol como presidente de la Generalitat, el Gobierno autonómico cobraba a las constructoras una mordida del 4% del presupuesto de adjudicación de obras públicas a cambio de favores en los concursos.

Tan grave acusación iba además acompañada de un editorial en el que el periódico arremetía contra Rafael del Pino, presidente de Ferrovial. Sin embargo, la compañía ha optado por guardar un prudente silencio ante estas graves acusaciones.

Ferrovial ya fue protagonista cuando estalló el ‘caso Palau’, producto de una investigación iniciada por la Agencia Tributaria sobre las actividades de la Fundació Palau de la Música-Orfeó Català, de la que Ferrovial es uno de los principales patronos. Las pesquisas de la Agencia Tributaria derivaron en una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción, que dio pie a una comisión de investigación en el Parlament de Cataluña.

Otros nombres

Por esta comisión de investigación desfilaron directivos de Ferrovial, que dieron su versión sobre los hechos. Incluso, el entonces director general de Construcción de Ferrovial, Pedro Buenaventura, fue imputado en el ‘caso Palau’ al considerársele como la persona de contacto entre la compañía y Félix Millet, por entonces presidente de la Fundació.

En el informe policial también aparecen reflejados los nombres de otras constructoras que supuestamente habrían financiado también a CDC, aunque en este caso a través de la Fundació Ramon Trias Fargas. Entre otros, aparecen los nombres de Dragados (ACS), FCC, Comsa Ente y Bruesa Construcciones, aunque las cantidades de pago fueron muy inferiores.

El informe policial ha salido a la luz en plena campaña de las elecciones al Parlament de Cataluña, que se celebrarán el próximo domingo. El documento concluye que tanto la familia Pujol como la familia Mas se habrían lucrado con la citada trama y habrían custodiado el dinero en cuentas suizas. 

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