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FCC reducirá un 28% su deuda con desinversiones y un duro ajuste en construcción

El nuevo consejero delegado de FCC, Juan Béjar, ha presentado un plan estratégico para los próximos tres años que pretende incrementar la eficiencia del grupo aun a costa de perder algo de tamaño. Los puntos fundamentales del plan se basan en la reducción de la deuda actual del grupo hasta el entorno de 5.200 millones de euros (un 28% menos), que se llevará a cabo con desinversiones de 2.200 millones de euros y un notable ajuste en el área de construcción, incluido el negocio cementero, que incluirá un recorte de plantilla que Béjar ha cuantificado ante los analistas en más de 1.000 empleados.

Estos cambios provocarán una reducción de ingresos para FCC, cuantificada en el plan en un 13%, hasta 9.700 millones de euros. Además, también supondrán ajustes de plantilla en el área de construcción, la más afectada por el plan entre los negocios estratégicos del grupo. La compañía también llevará a cabo una reducción de su estructura comercial para adaptarla a las circunstancias del mercado.

Su filial Alpine, cuyos problemas financieros han protagonizado la segunda mitad del pasado ejercicio para FCC, también se verá afectada por el plan ya que recortará sus mercados de actuación para quedarse únicamente en los más rentables y acometerá también un proceso de desinversiones en negocios no estratégicos.

La construcción languidece frente a los servicios

Incluyendo el área de cemento, en construcción FCC invertirá 240 millones hasta 2015, una cantidad nada comparable a los 1.100 millones previstos para el área de servicios, que se consolidará como la gran apuesta del grupo.

Además, FCC también pretende modificar la estructura de su deuda, con el fin de reducir el peso de la deuda bancaria sobre el total. La compañía ha tratado en los últimos meses de salir al mercado de renta fija corporativa para abrir nuevas vías de financiación aunque sin éxito, salvo alguna pequeña emisión por parte de su filial Alpine.

FCC cerró el pasado ejercicio con pérdidas superiores a los 1.000 millones de euros debido a ajustes y provisiones, sobre todo relacionados con Alpine y con su filial cementera Portland Valderrivas. El plan estratégico 2013-2015 supone el inicio de la etapa de Juan Béjar al frente del mando ejecutivo de la compañía, tras la marcha a comienzos de año de Baldomero Falcones, mentor del anterior plan en el que, entre otras novedades, se incluyó la entrada en el sector energético.

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