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Cifuentes tumba las propuestas de Carmena para el taxi: subir la carrera o un suplemento de 7 € para Atocha

La contratación de servicios a través de apps va ganando terreno

El permiso del Tribunal Supremo para que todas las licencias VTC pedidas por las empresas entre 2013 y 2015, aproximadamente 10.000 permisos administrativos que entrarán en el mercado en los próximos meses, ha caído como una bomba en el ya de por sí susceptible sector del taxi. Mientras Elite Taxi,  organización líder en Barcelona, liderará un intento de bloquear Madrid este miércoles en protesta por esta decisión judicial, en la capital la Comunidad y el Ayuntamiento no se ponen de acuerdo sobre cómo debe afrontar el mundo del taxi el aumento de competencia y la presión de Uber, Cabify, Car2Go y el resto.

En el modelo del taxi de Madrid, el principal mercado del país, el ayuntamiento hace la propuesta de subida o bajada de tarifas y es la administración regional la que aprueba o tumba esta propuesta. En la reunión del órgano decisorio el próximo 15 de diciembre, Madrid ya tiene decidido echar para atrás la propuesta del consistorio de Manuela Carmena: una subida de 2,5 euros a 3 euros por la bajada de bandera en los fines de semana. Según Ahora Madrid, este incentivo de 50 céntimos más haría que los taxistas estuvieran más interesados en salir a trabajar y evitar la carencia de vehículos que se nota especialmente en los fines de semana navideños que ya han empezado.

Desde la federación mayoritaria en Madrid, Fedetaxi, y la Comunidad tienen otra idea. Según ha asegurado el director general de Transportes, Pablo Sardinero, a este diario, la idea de la CAM es más bien "eliminar todos todos los suplementos por subida y llegada a los sitios para tener una garantía jurídica al usuario. La propuesta que nos ha mandado el ayuntamiento es que mantiene el suplemento de destino a las terminales de aeorpuerto y la comisión va a tumbarlo. La competencia ajusta precios por debajo de lo que marca el taxi y es capaz de flexibilizar y el taxi está más restringido. No tiene sentido subir precios teniendo en cuenta que la competencia juega a precios fijos y siempre por debajo del preico de la tarifa fija".

Según Sardinero, "hay que trabajar con el pensamiento de que hay competencia" y no de que se está en un mercado cautivo. "Es absurdo que para potenciar que los taxistas salgan se suban tarifas. Lo que hay que hacer es liberalizar pero no a costa del usuario, y que salga quien quiera. En esa desigualdad de competencia siempre va a salir perdiendo el taxi, porque la VTC va a salir a precio más bajo y los fines de semana va a haber más VTC que taxi". En el momento de más demanda de la semana, cuando más se sale, hay 3,86 taxis por cada VTC en Madrid, lo cual es muy poco según la CAM.

Las propuestas del consistorio no van, sin embargo, en esta línea. Hace unos meses se deslizó otra propuesta municipal que consistía en aumentar el suplemento para salir o entrar a la estación de Atocha, una tarifa que el gobierno controlado por Podemos quería establecer en 7 euros. Para la organización empresarial mayoritaria, ello hubiera supuesto "destrozar al servicio".

Tarifas dinámicas

Fedetaxi, la patronal mayoritaria en la capital, ha propuesto tarifas dinámicas para solucionar esta situación y desde la administración regional se está de acuerdo. "Algunos como MyTaxi ya hacen ofertas. En verano hicieron 50% de rebaja para ir al aeropuerto y eso compite contra la VTC al menos en igualdad de condiciones y hace una competencia interesante. Eso se puede hacer porque en algunos concursos públicos usan precios inferiores al taxímetro aunque saben que debe ajustarse. Lo otro lo paga el taxista con una cuota o la publicidad. Lo importante es marcarlo a través de la ordenanza para que el usuario y el servicio tengan una igualdad de equilibrio. El taxi tiene que tener una propuesta de cambio real sabiendo que la situación en que nos hemos encontrado es difícil".

Ambas administraciones tendrán que llegar a acuerdos si no quieren que se prorrogue automáticamente la situación del año pasado, con una congelación de tarifas que ya dura varios años. Una prórroga de precios impediría, según considera la administración de Cristina Cifuentes, promover una campaña de imagen necesaria en estos momentos para el sector frente al incremento de la competencia.

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