Publicado: 01/04/2016 04:00
Deóleo acogió esa denominación en julio de 2011 cogiendo los activos aceiteros de la extinta SOS Corporación Alimentaria, que había sufrido un caso de posible estafa bajo la dirección de los hermanos Jesús y Jaime Salazar, aún pendiente de dirimirse en los tribunales. Desde ese año inicio de década y aún bajo gobierno de Zapatero, la compañía ha cumplido su primer lustro de resultados y el balance no es muy positivo: 356 millones de pérdidas netas acumuladas en este periodo, una deuda que se ha reducido pero poco (de 662 millones a 524) y una facturación que ha caído de 1.109 millones a 817.
Además de las cuentas, la compañía ha sufrido recientemente un segundo recall en Estados Unidos: ha tenido que retirar voluntariamente 14.000 botellas de aceite de dos de sus marcas italianas porque contenían pesticidas no autorizados en el mercado norteamericano.
Con respecto a las retribuciones, las remuneraciones del consejo de administración han mantenido sus cifras vigorosas, al alcanzar los 10,1 millones de euros para los 12 miembros del consejo de administración en este periodo, 16 millones si se cuenta toda la alta dirección. En estos años, aproximadamente un 12% del gasto en sueldos de Deóleo se ha ido en dietas, remuneraciones y retribuciones del consejo de administración y los altos directivos, según la información de auditoría que la compañía ha remitido a la CNMV. La remuneración del consejo, no obstante, se ha reducido un 45%.
La compañía minimiza su segundo recall en unos meses, de mucha menor cuantía que el anterior
El nuevo director general de la compañía, Manuel Arroyo, reconoció en una reunión con prensa que habrá que contener el gasto salarial ante la situación de pérdidas de la compañía, controlada desde el año pasado por el fondo británico CVC. "Contendremos el gasto en retribuciones", aseguró el exejecutivo de marketing de Coca-Cola en Asia, tras presentar los resultados de la compañía que parece no levantar cabeza, arrastrada en España por el poderío de la marca blanca (especialmente, de Mercadona) y afectada por el alto precio de la materia prima.
Un segundo recall por pesticidas no autorizados
Deóleo ha sufrido un segundo episodio de 'recall' en Estados Unidos a mitad de este mes de marzo, cuando de manera voluntaria la compañía tuvo que solicitar la retirada de producto de dos de sus marcas más relevantes, Bertolli y Carapelli, por el uso de pesticidas que son legales y se pueden utilizar en Europa pero no así en Estados Unidos. La cuantía de la retirada del producto fue pequeña, apenas unas 2.200 cajas (unas 14.000 botellas), y de mucha menor cuantía que otro recall que sufrió la compañía en noviembre cuando también hubo de retirar aceite de oliva por estar "rancio". En este caso se encontraron trazas de trifloxistrobin y tebuconazol. La prensa norteamericana ya ha informado de este hecho.
La empresa explica la situación en que fue un problema logístico, en el que se enviaron al país norteamericano una partida de cajas que no estaban destinadas para este mercado.
El mercado norteamericano es uno de los activos más estratégicos para la compañía española, pues su crecimiento de ingresos es la gran esperanza para poder compensar la pérdida de cuota de mercado en España, el principal mercado. Las marcas italanas Bertolli y Carapelli, adquiridas por Jesús Salazar, son el gran activo en este mercado dado el buen nombre de los aceites italianos en Estados Unidos.
Venta de naves por 800.000 euros
Pero no todo iban a ser noticias negativas, y en el primer trimestre del año, según el informe de auditoría la compañía ha conseguido vender unas naves en El Campello (Alicante), que poseía desde hace mucho tiempo pues pertenecían a SOS Corporación y estaban destinadas al sector arrocero. La empresa ha sacado más de 800.000 euros por ellas, lo que se corresponde con una plusvalía de más de 600.000 euros que pueden
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