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El divertido mail que relaja al personal de la 'city' madrileña y del Tribunal Supremo cada viernes

El ingeniero de telecomunicaciones Arturo Hernández Montes es el creador de #mdv.

Viernes. Ese día de la semana en el que la gente entra en la oficina con el mejor de sus humores para luego salir como si le persiguiese las llamas de un incendio. En la 'city' madrileña y sus alrededores se respira otro ambiente, una atmósfera que nada tiene que ver con la seriedad y disciplina habitual de quienes trabajan en los bufetes de abogados, los bancos, las instituciones o las grandes firmas de la consultoría. Tanto es así que algunos se atreven a cruzar las puertas de sus empresas en vaqueros y sin corbata. Es el día perfecto para encender el ordenador y ultimar algunas gestiones mientras llega el único correo electrónico que de verdad apetece: el Mail del Viernes.

Se trata de un mail con periodicidad semanal que recopila la actualidad en clave de humor; curiosidades; un conjunto de tuits e imágenes desternillantes e iniciativas entretenidas de ONGs. Empezó a circular en 2008 en un departamento de una conocida multinacional por iniciativa de un becario recién llegado de Navarra que se tomó tan en serio hacer divertidos los viernes para sus compañeros que, en 2014, se vio obligado a constituirlo como empresa.

Bajo el lema Nunca discutas con un imbécil, te hará descender a su nivel y allí te ganará por experiencia -y haciendo honor al humorista estadounidense Mark Twain- el Mail del Viernes, o #mdv en su versión abreviada, llega hoy a 12.000 suscriptores por semana, lo que supone un total de más de 50.000 visitas a la página al mes. Aunque el perfil de sus lectores responde en su mayoría a jóvenes profesionales de entre 21 a 40 años, también ha calado entre varios altos cargos de mayor edad, entre ellos, varios magistrados del Tribunal Supremo que, por un rato, se olvidan del mazo.

"Me consta que muchos directivos reciben el mail cada viernes, también llega al Supremo", asegura Arturo Hernández, aquel ingeniero en Telecomunicaciones en prácticas que siete años después y "pese a que mi jefe también lo lee" ha ascendido en la firma de servicios profesionales para la que trabaja. "Aunque solo podemos cuantificar 50.000 visitas al mes, lo cierto es que son muchas más porque cada suscriptor reenvía el mail a sus compañeros y amigos", comenta.

Si bien el 82% de los lectores se concentra en España, el 'Mail del Viernes' se puede leer desde 148 países como Suiza, Japón o Hawái

Además, no solo se difunde en España. Si bien el 82% de los lectores se concentra en la península, #mdv sacude ordenadores en 148 países. "Hay tantos españoles por el mundo que nos leen en Japón y en Hawái. Ten en cuenta todos los españoles que trabajan para el ICEX, en embajadas...Últimamente hemos notado muchas visitas desde Suiza, debe ser que varios empresarios han viajado allí este mes", dice. 

Cuando Hernández, nacido en Pamplona, pero de madre murciana, comenzó a trabajar en su compañía, recuerda que había mucha gente joven, pero un ambiente muy serio. "Por eso decidí hacer divertidos los viernes, que es el día en el que menos trabajamos y, todavía hoy, ese sigue siendo mi objetivo principal", afirma el joven, quien se considera el "más serio de su familia". Reconoce que las quejas del sector femenino de sus lectores (36%) le llevaron a introducir cambios en la publicación original. "Antes todos los mails comenzaban con imágenes de chicas porque el 64% de los suscriptores son hombres, pero recibí algunas quejas y ahora también aparecen fotos de chicos. ¡Con el cambio, ahora son los hombres los que se quejan!", señala.

Un modelo de negocios que les da para una cena

Pese a que ya es una empresa y ha tenido que incorporar a otra persona para que le ayude a desarrollar contenidos y a hacer seguimiento de la web, el Mail del Viernes continúa siendo un pasatiempo que no resta dedicación de su trabajo real al ingeniero. "Nos lo pasamos muy bien recopilando imágenes y contenido para las secciones y la gente lo aprecia muchísimo. Lo veo como un hobby, supongo que podré hacerlo hasta que tenga familia o vean que me desconcentro", bromea. Los envíos del mail se programan fuera del horario laboral para que los lectores puedan recibirlo a partir de las 10 de la mañana de cada viernes.

Su modelo de negocios aún está en desarrollo y "solo nos da para salir de cena alguna vez". Por un lado, cada tres semanas ofertan espacios a compañías de nueva creación, startups, para que den a conocer sus productos y servicios. El precio que estas pagan por publicitarse varía en función de los clicks que los lectores hagan en los anuncios. "Las startups son empresas nuevas que necesitan darse a conocer por lo que nuestra plataforma supone una ventana para llegar a un público concreto", explica.

El equipo de este curioso mail pretende seguir creciendo y consolidarse en otras ciudades españolas además de en Madrid, donde se concentra el 50% de sus "adeptos"

Por otro lado, la firma ha comenzado a captar ingresos publicitarios de parte de pymes y empresas más consolidadas como, por ejemplo, Borges, cuya marca Popitas llevó a cabo una campaña para promocionar sus famosas palomitas.

"La idea es que la publicidad que aparezca en la web sea divertida y se adapte a nuestro contenido, que invite a nuestros lectores a interactuar", aclara. Además de la publicidad, #mdv tiene un espacio destinado a merchandising donde ofertan productos tanto para directores ejecutivos como para becarios.

 
El equipo de este curioso mail pretende seguir creciendo y consolidarse en otras ciudades españolas además de en Madrid, donde se concentra el 50% de sus "adeptos". "Estamos trabajando en una versión en inglés por petición de muchos jóvenes que están fuera y que lo quieren compartir con sus compañeros de trabajo en otros países. Pero, ¿qué pasa si crece tanto que desconcentra a millones de empleados todos los viernes? Siempre se puede recurrir al botón ¡¡Qué viene el jefe!!, una pestaña que remite al usuario de la web a la típica página aburrida con gráficos.

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