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Ruptura entre banca y sindicatos: sin convenio a partir del 1 de abril

Manifestación de trabajadores de Novagalicia protestando por los despidos.

La AEB "hace imposible el convenio". Así de tajante se muestran los responsables del sector financiero del sindicato Comisiones Obreras respecto de la negociación del nuevo acuerdo laboral para los trabajadores de la banca, que actualmente pasa por un momento de ruptura, según explican los propios representantes sindicales en un reciente artículo. Desde CCOO acusan a la patronal de "ser solo una fachada" que en el fondo solo busca recortar en todos y cada uno de los capítulos del nuevo convenio sectorial.

Estar sin convenio es "una situación inédita que supone quedarse sin la base sólida de los derechos, salarios y condiciones laborales que ahora disfruta"

En este contexto de negociaciones prácticamente truncadas, el próximo 1 de abril termina el periodo de ultraactividad que patronal y sindicatos se habían dado para llevar las negociaciones. La falta de acuerdo dejará, según estos últimos, a cerca de una cuarta parte del total de trabajadores de la banca, unos 50.000, sin convenio, "una situación inédita que supone quedarse sin la base sólida de los derechos, salarios y condiciones laborales que ahora disfruta", según explican desde CCOO a sus representados en su artículo.

Aunque por el momento no hay acuerdo, una posible prórroga a la ultraactividad no sería una novedad inédita. De hecho, el actual periodo negociador, que termina el 31 de marzo, ya es una prórroga de uno anterior que culminaba teóricamente el 26 de febrero, cuando la vigencia del convenio de banca tocaba a su fin. Para entonces, las posturas entre AEB y sindicatos se presentaban como más cercanas, y el acuerdo parecía inminente a falta tan solo de flecos, en contraste con la negociación del subsector de las antiguas cajas de ahorros (Ahorro), que amenazaba con estallar. Pero los flecos durante estas semanas han resultado ser posiciones inamovibles. 

"La AEB lo quiere todo"

Muy críticos con la negociación llevada hasta ahora se muestran los representantes de la Federación de Sindicatos de Banca (Fesibac), tanto que la califican de "esperpento". En su opinión, buena parte de los problemas proceden de la firma de un acuerdo secreto firmado con la AEB en la que se renunciaba a la mayor parte de las reivindicaciones. "Dicho de otra forma, claudicaron en varias cuestiones que desde un principio calificaron de abusivas", critican desde esta federación sindical, que acusa a CCOO y UGT de ahora alarmar por una "situación de emergencia" provocada en parte por ellos mismos. 

"¿Por qué ahora la situación es de emergencia? ¿Qué es lo que ha cambiado? ¿Acaso la patronal ha modificado algo su postura inicial? ¿Acaso pensaban que la AEB no les iba a exigir los compromisos que adquirieron en el regresivo acuerdo que firmaron el pasado diciembre? ¿Por qué han llegado a la apurada situación que nos dicen, habiendo agotado el tiempo de “ultraactividad” que tanto les preocupa, y sus estériles prórrogas, sin recurrir a los métodos de presión sindicales?", añaden desde Fesibac, que llaman al resto de representantes de los trabajadores a movilizarse públicamente.

También a favor de la movilización parecen estar los representantes de CCOO, quienes llaman en su último artículo a todas las plantillas de todos los bancos a "defender" su empleo, salarios y condiciones laborales, entre otras cosas, para obligar a la patronal bancaria a aceptar un nuevo convenio menos restrictivo.

Renuncias en las cajas de ahorros

Mientras la negociación de la banca se complica al extremo, la del sector de las cajas de ahorros también presenta dificultades. Así lo constatan entre otros los representantes de UGT, que consideran que la propuesta de convenio que actualmente mantiene la patronal ACARL es injusta y llena de recortes para los trabajadores. Entre otras cosas, las entidades reclaman la instauración de la jornada partida, la ampliación a los jueves por la tarde, una bajada del 2% en los trienios, así como la desaparición de diversos pluses y ayudas existentes hasta ahora.

Tras las movilizaciones organizadas por los sindicatos, ACARL aceptó la retirada de una de sus exigencias iniciales, como era la ampliación de la movilidad geográfica forzosa (de 25 a 50 kilómetros), tal y como anunciaron los propios sindicatos. Pese al avance, ambas posturas se mantiene "radicalmente distanciadas", según UGT, por lo que las movilizaciones seguirán, según han anunciado los representantes sindicales de las cajas de ahorros.

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