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La Justicia juega con la vieja ‘operación Chamartín’ mientras el Ayuntamiento ultima aprobar la nueva

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La antigua ‘operación Chamartín’ seguirá circulando por los pasillos de los tribunales aunque con un efecto notablemente diluido, por no decir nulo. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), que tumbó el desarrollo a mediados de 2013, al anular la modificación urbanística que la hacía posible, deberá volver a pronunciarse sobre este asunto por orden del Tribunal Supremo, que ha estimado el recurso presentado en su día por el Ayuntamiento de Madrid, la promotora de la operación, Renfe y Adif, entre otros. Y mientras la vieja operación va y viene de los tribunales, la nueva, rebautizada con el nombre de Distrito Castellana Norte, está muy cerca de ser aprobada definitivamente por el Consistorio madrileño.

Este viernes finaliza el plazo de alegaciones a la modificación urbanística aprobada provisionalmente por el Ayuntamiento de Madrid a mediados del pasado mes de febrero y que sirve de base para la puesta en marcha del proyecto Distrito Castellana Norte, que recogió el testigo dejado por la operación Chamartín, precisamente a raíz de la sentencia del TSJM.

Si la tramitación de las citadas alegaciones se aligera, el Consistorio podría dejar aprobada definitivamente el cambio urbanístico antes de las elecciones municipales y autonómicas del próximo 24 de mayo.

Este proceso poco tiene que ver con el que continuará en los tribunales. De hecho, la decisión del Supremo ha consistido básicamente en devolver el caso al TSJM. “Ordenamos la retroacción de lo actuado al momento inmediatamente anterior al de dictar sentencia por el Tribunal de instancia, a fin de que, por tratarse de una cuestión regulada por el Derecho autonómico de la Comunidad de Madrid, sean resueltas todas las cuestiones controvertidas por la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid”, señala el fallo del Alto Tribunal.

Ahora la pelota vuelve a estar en el tejado del TSJM aunque, en cualquier caso, la decisión que tome este tribunal se referirá siempre a la antigua operación, que ya no está sobre la mesa. El diseño de Distrito Castellana Norte se llevó a cabo para esquivar precisamente las restricciones contempladas en la sentencia de este tribunal. Aunque volviera a fallar en contra de la operación, ésta seguiría adelante en su nueva versión.

Sin motivación

Los magistrados del Supremo consideran que la sentencia del TSJM carece de la motivación suficiente en relación a cuestiones esenciales para resolver el pleito, por lo que ordena a la misma Sala del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que dicte una nueva sentencia dando contestación al asunto. El Supremo cree que aunque el TSJ de Madrid se refiere en su sentencia a estas cuestiones, que son las esenciales de este proceso, lo hace sin superar el nivel de exigencia de motivación que se requiere.

Entienden que no dice cómo incide dicho régimen transitorio en la realidad jurídica existente.

Mientras, el Ayuntamiento lo tiene todo listo para aprobar la modificación urbanística, que se asegurará mientras se haga dentro de la presente legislatura, toda vez que el Partido Popular cuenta con mayoría absoluta en el Consistorio. El trámite de las alegaciones marcará los tiempos y si es necesario recurrir a un pleno extraordinario para proceder a dicha aprobación.

La nueva Operación Chamartín supondrá la construcción de más de 16.000 viviendas en el norte de la capital, de las que 4.000 serían protegidas, y la modernización del norte de Madrid capital.

Este proyecto destinará 1,2 millones de metros cuadrados a oficinas, 305.000 metros cuadrados a equipamientos, 165.000 metros cuadrados a hoteles y 165.000 metros cuadrados a comercios, más otros 542.000 metros cuadrados de zonas verdes.

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