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Florentino llevará al Real Madrid a Australia con un contrato de 1.850 millones para ACS bajo el brazo

Florentino Pérez vuelve a entrelazar los caminos del Real Madrid y de ACS

Florentino Pérez comienza a recuperar el favor de un mercado fundamental para ACS: Australia. Cimic, la antigua Leighton, acaba de adjudicarse un gran contrato para el diseño y construcción de una autopista en Sydney, valorado en unos 1.850 millones de euros, el mayor obtenido en mucho tiempo por una compañía que estaba atravesando por muchos problemas. Curiosamente, la adjudicación se produce apenas unos meses después de que Pérez confirmara que el Real Madrid, club que también preside, haría parte de la pretemporada en tierras oceánicas, una decisión que poco tiene que ver con lo deportivo, a tenor de la opinión de expertos y de los propios profesionales de la primera plantilla.

A finales del pasado año, el Real Madrid anunciaba que la preparación para la próxima temporada discurriría por Australia y China. Desde hace algo más de un año, ACS trabaja a fondo para tratar de recuperar el pulso de Leighton, la filial australiana de su participada Hochtief, que atravesaba una etapa difícil debido a factores como su elevado endeudamiento e incluso algunos casos de corrupción que habían hecho que la empresa cayera en desgracia en su mercado natural.

Los problemas llegaban incluso a los gobiernos locales, algunos de los cuales habían mostrado sus reticencias a contratar con Leighton debido a su delicada situación económica, que se agravó cuando ACS tomó su control, toda vez que la deuda comenzó a dispararse, hasta el punto de que el plan de saneamiento de la empresa, liderado por el futuro consejero delegado de ACS, Marcelino Fernández Verdes, ha incluido la venta de numerosos activos.

Pese a que los expertos desaconsejan este tipo de viajes, Florentino Pérez no dudó en llevar al Madrid a estas tierras con el fin de tratar de limar asperezas

Pese a que los expertos desaconsejan este tipo de viajes para la preparación de la temporada de fútbol, Florentino Pérez no dudó en llevar al Real Madrid a tierras australianas con el fin de tratar de limar asperezas con las autoridades locales, que verán como dentro de algo más de un mes podrán recoger los beneficios de una visita que, sin duda, congregará muchos visitantes.

Australia no es precisamente un mercado pujante para el mundo del fútbol, que no es ni mucho menos el deporte rey en los antípodas (superado claramente por el rugby, el fútbol australiano, el cricket y el baloncesto), pero sí en el terreno de las infraestructuras. Los resultados no se han hecho esperar, hasta el punto de que la antigua Leighton acaba de llevarse uno de los grandes contratos de los últimos tiempos, el primero de los grandes bajo la denominación de Cimic, precisamente adoptada para dejar atrás la etapa anterior y desligar a la compañía de la sombra de la mala gestión económica y la corrupción.

Repite jugada y protagonistas

El nuevo equipo técnico del Real Madrid, que acompaña al recién estrenado entrenador Rafael Benítez, considera que un viaje tan largo no es lo mejor para la pretemporada, etapa en la que se sientan las bases de la preparación física del equipo.

Sin embargo, la visita y los compromisos estaban diseñados desde diciembre y la vuelta atrás era inviable porque, además de la elevada compensación económica que debería afrontar el Real Madrid, los planes de Florentino Pérez tenían poco que ver con lo deportivo, una vez más.

Según los datos que facilitó Cimic en un comunicado, la adjudicación supondrá unos beneficios aproximados de 615 millones de euros en los próximos cuatro años para la compañía, que se ha hecho con el contrato como componente de un consorcio en el que también figuran la coreana Samsung y John Holland, precisamente uno de los activos que la antigua Leighton ha tenido que vender.

No es la primera vez que los destinos del Real Madrid y de ACS se entrecruzan. Precisamente fue Florentino Pérez, en su anterior etapa al frente del club, el que empezó a pasear al equipo por tierras lejanas, con especial incidencia en la región de Asia-Pacífico, por la que desde hace mucho tiempo suspira el ejecutivo.

Por entonces, en los años 2005 y 2006, aún no había ni siquiera entrado en el capital de Hochtief pero logró un notable contrato en China a través de la filial de servicios portuarios de Dragados, grupo al frente del cual se encontraba Fernández Verdes.

Las giras asiáticas, denostadas en lo deportivo y consideradas por entonces como uno de los motivos que explicaban el deficiente estado físico de la plantilla, dieron en cambio sus frutos en la parte empresarial. Diez años después, la historia se repite e, incluso, con idénticos personajes.

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