Los economistas creen que el impuesto de hipotecas para la banca acabará pagándolo el cliente

El Consejo General de Economistas (CGE) considera que si el Gobierno propone un cambio de legislación a raíz de la decisión del Tribunal Supremo para que sea la banca la que a partir de ahora afronte el pago de los impuestos de las hipotecas "aumentarán los costes de los préstamos y se encarecerán para los que los adquieran", con lo que al final seguirán pegándolos los clientes.

El presidente de esta organización, Valentín Pich, lamentó en un debate sobre fiscalidad organizado en su sede que "no es buena la imagen de falta de inseguridad jurídica" que ha trasladado España, dado su nivel de endeudamiento y su "compleja situación institucional".

Sobre el impuesto de las hipotecas, señaló que es un tributo decimonónico que "tenía sentido cuando las personas solo tributaban cuando iban al notario, pero que no tiene ningún sentido en un mundo digital".

Desigualdad por comunidades

En su opinión, el problema principal es que España carece de un modelo de financiación autonómica que homogeneice la fiscalidad de las comunidades autónomas y acabe con las grandes diferencias que existen entre ellas, tanto en el impuesto sobre los Actos Jurídicos Documentados (AJD) -cuyo tipo impositivo asciende en algunas comunidades al 1%-, como en otro tipo de tributos como los medioambientales. 

"Tenemos un problema en nuestro país de que hasta que el Gobierno de turno no ponga encima de la mesa un modelo de financiación autonómica no puede haber un debate de nada. Por ejemplo, en la presión fiscal medioambiental, vemos que hay muchos nuevos impuestos que tienen intención recaudatoria, están llegando de manera desordenada", lamentó. 

El presidente del CGE destacó que a su organización le sigue sorprendiendo que "no se aborde el debate con tranquilidad, que no haya un modelo homogéneo, porque esto fomenta problemas jurídicos y demagogia". 

Por su parte, Juan Moscoso del Prado, economista y miembro del Consejo Económico y Social (CES) y exportavoz de Economía del Congreso por el PSOE, apuntó a la necesidad del Gobierno de legislar en el impuesto sobre las hipotecas y recalcó que el hecho de que la tasa se repercuta al cliente dependerá del buen funcionamiento del mercado hipotecario.