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Economía

La crisis del coronavirus revoluciona el accionariado de la matriz de Iberia

Avión de Iberia

La incertidumbre que sobrevuela el holding aéreo IAG -que agrupa a Iberia, Vueling, British Airways, Aer Lingus y Level- por la crisis del coronavirus está revolucionando su accionariado. El grupo no levanta cabeza en Bolsa desde hace semanas con constantes desplomes en su cotización y algunos inversores significativos han reducido su participación en la compañía en los últimos días, mientras otros aprovechan para hacerse con buena parte de sus títulos. 

Es el caso de Ken Griffin, fundador del fondo de inversión Citadel, que ha aflorado una participación superior al 3% en el capital social del grupo y se ha convertido en el cuarto mayor accionista, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La propia firma de inversión Citadel también ha reforzado su posición pasando del 1% al 2,15%. 

Por contra, el fondo británico Orbis Investment Management, que recientemente había comprado el 2,19% de las acciones, ha reducido su presencia en la compañía al 0,96%; mientras que el estadounidense Europacific, que mantenía su participación estable en el 5,26% desde hace seis años, en las últimas jornadas ha perdido su condición de accionista significativo al reducirla al 2,84%.

Más moderados han sido los movimientos de Invesco, pasando del 2,05% al 1,98%. También ha sido leve la disminución de la gestora Capital Research and Management, que ahora controla el 9,78% de los títulos, frente al 10,01% que registraba desde 2017. Así, prácticamente todos los accionistas han movido ficha excepto Lansdowne Partners International y Qatar Airways, principal accionista con el 25,1% capital.

Su principal accionista, en apuros

El pasado febrero, Qatar Airways ya reforzó su apuesta por IAG al aumentar su participación en el grupo hispano-británico del 21,1% al 25,1%. Pero entonces las aerolíneas no sufrían como lo hacen ahora. Las compañías han reducido a mínimos su actividad ante el cierre de fronteras y el veto a los viajes por el riesgo de expansión del virus. IAG ha dejado en tierra la mayoría de sus aviones y prevé una caída en sus beneficios

Qatar Airways mantiene los servicios comerciales de pasajeros y espera operar 1.800 vuelos en las próximas dos semanas para repatriar a viajeros en aquellos países donde pueda operar. "Hemos recibido muchas solicitudes de gobiernos de todo el mundo, embajadas en ciertos países, solicitando a Qatar Airways que no deje de volar", asegura el presidente ejecutivo Akbar al-Baker a Reuters.

Sin embargo, la demanda es muy baja y los aviones operan con menos pasajeros de lo habitual, lo que afecta inevitablemente al negocio de la aerolínea. En este sentido, el presidente advierte que aunque están tomando medidas, se están quedado sin efectivo y sólo tiene suficiente para mantener las operaciones "durante un periodo muy corto", por lo que probablemente tendrá que pedir ayuda a su Gobierno.

Por su parte, IAG ha asegurado este lunes en un hecho relevante a la CNMV que el grupo cuenta con líneas de crédito generales y comprometidas garantizadas por aeronaves equivalentes a 2.100 millones de euros y "continúa teniendo una posición sólida de liquidez con una caja, activos líquidos equivalentes y depósitos remunerados de 7.200 millones de euros a 27 de marzo". En este sentido, en cuanto al efectivo total y las líneas de crédito no dispuestas, alcanza actualmente los 9.300 millones de euros.

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