Francia busca adelantar a España en la carrera por el Sandbox ante la debilidad del Gobierno

España, pese a todo, sigue adelante con el Sandbox. Los plazos siguen su curso pero ya hay nuevos países que quieren llevarse su 'parte del pastel'. Sobre todo porque el Ejecutivo español está mostrando cierta debilidad, que podrías perjudicar en la implantación de este 'banco de pruebas'. 

Alemania sigue manteniendo su postura contraria a este tipo de innovación financiera, pero Francia ya comienza a dar su brazo a torcer y ya busca alternativas para ser un jugador relevante, según Jaime Bofill, socio de Instituciones Financieras de Hogan Lovells. 

Dicho bufete es el que ha asesorado a la AEFI en la propuesta de Sandbox presentada al Ministerio, tras haber asesorado a Reino Unido en la creación de su Sandbox.

Próximos pasos 

El banco de pruebas podría salir mediante un decreto de ley -escenario menos probable- o mediante trámite parlamentario, que sería la forma más lógica de sacarlo adelante. Esto supondría tener que defender la Ley delante de todos los partidos políticos. 

Por el momento, la EAFI tiene agendadas reuniones con los principales partidos políticos para dar a conocer las bondades de este entorno de pruebas financiero. 

Según las estimaciones, el primer Sandbox podría estar en funcionamiento a principios de 2019, si se siguieran las fechas previstas y si no se produjeran nuevos incidentes, como una elecciones anticipadas. Escenario poco probable. De hecho, el sector ya trabaja dando por hecho que la normativa se va a aprobar. 

La Ley presentada por el equipo de la ministra de Economía, Nadia Calviño, es prácticamente la misma que en su momento creó Luis de Guindos y que defendió Román Escolano, por lo que su aprobación no debería suponer un problema. 

Lo que aún no ha quedado claro es qué competencias tendrán cada organismo -Banco de España, CNMV y Dirección General de Seguros-. Esta situación podría provocar que el primer Sandbox se atrasara, ya que no están claras las directrices. 

No obstante, lo que está claro, es que España tiene una oportunidad de oro para liderar una de las iniciativas más interesantes e innovadoras actuales. Ser pioneros en tecnología financiera podría abrir muchas puertas a este país.