Los hombres de negro se reunieron hasta seis veces con los sabios para tutelar la reforma fiscal

El dictado a la economía española continuará a partir de ahora, a través de sus impuestos porque los hombres de negro han tutelado la reforma fiscal propuesta al Gobierno. Fuentes de la comisión de sabios reconocen que los expertos del Gobierno se han reunido hasta en seis ocasiones con los representantes de OCDE, FMI y UE para consultar las medidas que iban a elevar al Gobierno. El presidente de la comisión, Manuel Lagares, admite: “Nos hemos reunido un par de veces con cada uno de ellos”, la última el mismo mes de febrero en que se cerraba el cuaderno de propuestas, reconocen integrantes de esa comisión.

Según la comisión, los grandes parámetros de impuestos y gastos han sido dibujados por la Comisión Europea que fijó que el peso de la recaudación sobre el PIB debía seguir oscilando entre el 37 y 38% mientras fijaba al Gobierno un recorte de gastos debían seguir recortándose un 3% en los próximos tres años hasta llegar al 39,7% en 2016. Esos grandes parámetros han sido también admitidos por el Ejecutivo en la Actualización del Programa de Estabilidad del Reino de España de 2013.

Esas líneas generales se han traducido, además, en el dictado de, al menos, cinco grandes medidas que los sabios han asumido como propias y trasladado al Ejecutivo:

1. El aumento del peso de los impuestos indirectos (IVA) frente a la merma de la imposición directa (Impuesto de la Renta). A ese sentido responde también el aumento de la fiscalidad medioambiental. Frente a las críticas de quienes defienden que la imposición indirecta es “regresiva”, es decir, que grava lo mismo a quienes tienen rentas altas y bajas, la UE y los sabios defienden que “de este modo, la reforma intensificará sus efectos positivos sobre la eficiencia, la capacidad de competir y el crecimiento y el nivel de empleo de la economía española”.
2. La reducción de las cotizaciones sociales y de las contribuciones a la Seguridad Social por parte de los empresarios:
3. La eliminación de las deducciones en todos los tributos: Es una de las grandes reclamaciones de la OCDE a la economía española a la que acusa de tener una maraña de exenciones que recorta la eficiencia recaudatoria.
4. La uniformidad fiscal con las medias europeas: La UE ha pedido que se impongan tasas similares a las que rigen en la Unión Europea. En impuestos como los del tabaco o el alcohol, eso significará multiplicar hasta por dos los impuestos especiales y encarecer notablemente “cigarrillos, alcohol y comenzar a pensar en gravar también el vino”, según reconoce el propio presidente de la comisión de sabios, Manuel Lagares.

El propio documento de los sabios reconoce que los organismos internacionales (especialmente la OCDE) han hecho “recomendaciones de gran interés para la reforma tributaria”.