El PSOE pide que se limiten los sueldos de los directivos del Ibex

Los socialistas pedirán que se modifiquen las escalas salariales para que ningún directivo gane 12 veces más que un trabajador dentro de una empresa. Esta clara limitación de los sueldos del Ibex es una de las conclusiones de la Conferencia Política del PSOE del fin de semana, con las que el partido pretende "volver a conectar con la mayoría progresista de España".

A imagen y semejanza de la Iniciativa 1:12, debatida ahora en Suiza y por la cual nadie debería cobrar en un mes lo que un trabajador de la misma empresa gane en un año, la propuesta ya la había presentado en el Congreso Esquerra Republicana de Cataluña y subraya el giro a la izquierda del PSOE.

Esquerra defendió entonces que los altos directivos del Ibex se embolsan unas 25 veces más que los empleados y que la brecha salarial estaba aumentando durante la crisis, tal y como refleja la encuesta de estructura salarial del INE de los años 2008 a 2010, la cual revela que la diferencia media entre los directivos y los empleados no cualificados subió de los 44.075 euros a los 49.679 euros.

Después de los escándalos de indemnizaciones millonarias en bancos como UBS que tenían que ser rescatados, los suizos aprobaron por referéndum la Iniciativa Minder, que pone coto a las políticas de bonus. Pero ahora irán un paso más allá y el 24 de noviembre someterán a votación la Iniciativa 1:12, que de aprobarse limitaría las retribuciones por ley.

¿Una medida progresista?

La polémica está servida. Los defensores de esta iniciativa argumentan que reduciría la desigualdad. Sin embargo, los detractores explican que las consecuencias serían nefastas, pues reducirían los ingresos fiscales y del sistema de pensiones; presentaría serios problemas de legalidad y, sobre todo, supondrían un serio inconveniente para que cualquier empresa extranjera se instale o permanezca en el país.

"Es como retrasar a toda la clase para que no haya desigualdades. Supone frenar el progreso", afirma un economista

“Semejante propuesta pondría límites a los más capaces igualando por abajo, igual que un país comunista. Es como retrasar a toda la clase para que no haya desigualdades. Supone frenar el progreso. Por eso, lo lógico es hacer la política redistributiva mediante el gasto y pagar clases especiales de refuerzo para los más retrasados, como hace Finlandia. Se trata de un claro incentivo para que el talento se vaya fuera. Esto es ridículo… ¿ quién puede pensar que el presidente del Santander gane sólo 150.000 euros?”, explica un economista.

De hecho, varias empresas suizas han anunciado que se llevarán a los directivos a otro país si entra en vigor la Iniciativa 1:12. El propio PSOE incluye en su ponencia que hay que “reducir las cargas administrativas asociadas a la inversión extranjera directa y agilizar los procedimientos. Esto supone, incluso, coordinarse con la política de inmigración, de forma que se facilite tanto la atracción de emprendedores extranjeros como el establecimiento en España de altos ejecutivos de multinacionales”.

¿Y Messi o Ronaldo?

O visto desde una óptica más mundana, “¿qué pasaría con los sueldos de Messi y Ronaldo y los ingresos que reportan a sus respectivos clubes? Y lo mismo ocurriría con cualquier ejecutivo”, comenta un empresario. “Esto tiene todos los visos de ser una medida populista que no llega a ningún sitio. El problema es que los políticos de ahora no han tenido actividad empresarial, lo tienen todo pagado, pero cobran por debajo de los 100.000 euros y quieren penalizar a todo el que esté por encima. PP y PSOE han llegado a cotas de intervencionismo extremas”, sostiene.

Un sondeo reciente en Suiza revela que el apoyo a la Iniciativa 1:12 se ha erosionado de cara al referéndum 

De hecho, aunque en Suiza las encuestas al principio arrojaban un empate entre las dos posiciones, un sondeo de la semana pasada mostraba que el apoyo a la Iniciativa 1:12 se había reducido hasta el 34 por ciento, mientras que la oposición se había elevado al 55 por ciento.

En su ponencia, el PSOE subraya que los costes laborales por unidad de producto se han reducido año tras año en términos nominales, mientras que los excedentes de las empresas han crecido en términos agregados. “De nada sirve que los costes laborales se reduzcan si ésta reducción es aprovechada por las empresas para elevar sus márgenes de negocio y no para trasladar esta rebaja a los precios que pagan los/as consumidores/as por sus productos”, recoge la ponencia.

No obstante, los expertos aducen que es esencial que las empresas tengan beneficios para que a la larga haya más inversión y por tanto más empleo.