Publicado: 03/08/2016 04:00
Hace escasas fechas conocíamos que el Ministerio de Hacienda ha detectado mediante drones e imágenes por satélite que 1,69 millones de inmuebles cuentan con alguna modificación no notificada al Catastro. Pero muchos de los afectados por este rastreo aéreo de más de 4.340 municipios ponen en entredicho la validez de la medida. Se da la circunstancia de que en muchos casos, la modificación no es tal, sino que se trata de instalaciones provisionales tales como cenadores, pérgolas o piscinas hinchables.
Si Hacienda ha detectado construcciones irregulares, la agencia regional del catastro enviará una carta al contribuyente para notificárselo. Y este último tiene quince días para presentar un escrito de alegación. En esa carta debe poner de manifiesto la disconformidad con la actualización realizada por Hacienda. Lo más aconsejable es adjuntar a dicho escrito pruebas que demuestren que los datos recibidos no se corresponden con la realidad. Pueden acompañarse desde fotografías hasta licencias de obra. El catastro rectificará si las alegaciones son fehacientes.
"Son procedimientos altamente recurridos y recurribles, ya que en muchos casos el Catastro atribuye edificaciones dónde no las hay, los metros son aproximados y no coinciden con los reales o bien atribuye construcciones tales como piscinas, cenadores, casetas, garajes a bienes que no están anclados al suelo y que no constituyen un elemento indivisible del inmueble", apuntan desde Legálitas.
En caso de que el escrito de alegaciones no sea estimado, el contribuyente recibirá otra carta. A partir de ahí comienza un nuevo plazo para interponer un recurso de reposición. En este se pueden incluir nuevas pruebas para confirmar que el inmueble analizado en realidad no presenta las características que se le imputan. Si el recurso volviese a ser desestimado, los expertos recomiendan presentar una reclamación económico administrativa, como último recurso antes de llegar a los tribunales.
La novedad de la actualización catastral ha sido el uso de imágenes aéreas mediante drones, satélites y Google Maps
En caso de que esta última instancia desestimase la reclamación, sería el momento de optar por la vía contencioso administrativa y dar inicio a un proceso judicial. Lo cierto es que cuando las construcciones no se han realizado, la demostración suele ser sencilla. Los afectados por la medida puesta en marcha por el departamento de Cristóbal Montor deben pagar una tasa de 60 euros y verán aumentado el valor catastral del inmueble, lo que significa abonar más dinero por el IBI.
El 8,6 % de los inmuebles urbanos tienen construcciones irregulares
El número de inmuebles con construcciones irregulares no declaradas por los ciudadanos equivale al 8,6 % de los inmuebles urbanos del padrón, según datos del Plan de Regularización Catastral. Este plan, ligado a la lucha contra el fraude, entró en vigor en 2013 y continuará durante este año y parte de 2017. A 20 de julio de este año, han sido regularizados 1,69 millones de inmuebles en 4.340 municipios.
Según Hacienda, esto supondrá una recaudación extraordinaria de 1.254 millones en el impuesto de bienes inmuebles (IBI), lo que representa un 24% más de lo calculado inicialmente por el ministerio. El 70 % de las omisiones regularizadas se correspondieron con nuevas construcciones, ampliaciones y piscinas sin declarar. La Dirección General del Catastro señala que el padrón urbano de cada municipio se incrementa ahora un 3 % de media.
El mayor porcentaje de piscinas está en Barcelona y Granada y donde más construcciones nuevas se encontraron fue en Almería, Granada y Huesca
Además, destaca que por cada euro invertido en el Plan se recuperan 16 euros, debido al incremento de recaudación en el IBI. De los 4.154 municipios cuya regularización ya ha terminado, la mayor parte, 1.312, correspondieron a Castilla y León, y la menor, 29, a Murcia. En cuanto al tipo de fraude, el mayor porcentaje de piscinas que han aflorado se dio en Barcelona y Granada y donde más construcciones nuevas se encontraron fue en Almería, Granada y Huesca.
"En la actualidad quedan múltiples localidades que aún no han sido objeto de revisión, por ello es importante que si hemos realizado algún tipo de obra en el inmueble procedamos a ir al Catastro para regularizar y evitar el pago de la tasa ya que así regularizaremos antes de que el Catastro lo detecte, además de tener más posibilidades de que los datos sean ajustados a la realidad", avisan desde Legálitas.
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