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Economía

La jugada de Ana Botín para sacar 'tajada' de la Operación Chamartín

Ana Botín, presidenta de Santander.

De forma casual o no, el Santander podría terminar sacando una buena tajada de la Operación Chamartín, la gran joya inmobiliaria del BBVA de Francisco González. El banco presidido por Ana Botín posee el 22% de Merlin Properties, la socimi que se ha destapado como posible candidata para quedarse con una gran participación del promotor Madrid Nuevo Norte, la sociedad de Distrito Castellana Norte (DCN), participada en un 75,54% por BBVA y el 24,55% por San José.

La noticia se publicó en primicia en dos medios del Grupo Prisa, El País y Cinco Días. Vozpópuli se ha puesto en contacto con las dos compañías implicadas, pero ambas han declinado hacer declaraciones al respecto. No obstante, fuentes cercanas al BBVA admiten que la transacción no está en la hoja de ruta actual y que mucho menos se cerrará este año. Lo que no quiere decir que no sea real. Las conversaciones se han producido y ahora Merlin Properties parte con una ventaja real frente al resto de sus competidores. Sobre todo por su 'españolidad'. 

De seguir adelante, Ana Botín terminaría recogiendo los frutos que ha sembrado el BBVA durante los últimos 25 años. Por otro lado, la decisión también tendrá que pasar por el aprobado del consejo de la socimi, por lo que el Santander podrá dar su opinión. 

El banco de la llama roja llegó a Merlin Properties después de que se integrara los activos residenciales de Metrovacesa, sociedad de la que el Santander era accionista de control, con un 70%, lo que se tradujo en una participación del 21,95% en la nueva compañía dirigida por Ismael Clemente. 

BBVA y Merlin, ligados hasta 2040

La relación de BBVA y Merlin Properties va más allá de esta operación. El banco azul es el principal arrendatario de la socimi ya que paga un 15,3% del total de las rentas. Los contratos firmados por ambas partes también son los más largos, con vencimientos entre el 2029 y el 2040 y con rentas que rondan los 120 millones de euros al año. 

Lo cierto es que el proceso de salida, total o parcial, de BBVA del capital de DCN no será precisamente rápido. Fuentes conocedoras de la situación llegan a asegurar que la operación no se producirá antes de que finalice el presente año ni incluso en el siguiente.

Por lo pronto, la promotora no cuenta aún ni siquiera con los terrenos sobre cuyo uso ganó el derecho hace un cuarto de siglo. Aunque la aprobación provisional de la modificación urbanística que hace posible Madrid Nuevo Norte por parte del Ayuntamiento de la capital ha sido un paso muy importante, aun resta un largo calendario de trámites hasta que las grúas y las excavadoras comiencen a entrar en el ámbito.

Contactos informales

La primera que se espera es la aprobación definitiva, a cargo de la Comunidad de Madrid, que trabaja en ello desde que el Consistorio le remitió la documentación, a comienzos del mes de agosto. A partir de entonces, comienza un proceloso recorrido burocrático que podría extenderse en torno a 18 meses.

Esta circunstancia no impide que, desde hace meses, BBVA esté estudiando diferentes alternativas para poner en valor su participación en DCN, tal y como tenía previsto desde el inicio. En su día, se llegó a plantear la posibilidad de una salida a Bolsa, una opción que, al menos a día de hoy, parece descartada.

La entidad financiera ha recibido diferentes muestras de interés de potenciales socios para convertirse en accionistas de DCN. Sin embargo, en la mayoría de los casos los contactos se han limitado a meras conversaciones informales.

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