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Economía

Iberdrola se adjudica un concurso de 1.000 MW en EEUU, equivalente a ‘dos Garoñas’

El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.

Iberdrola ha obtenido el contrato para el desarrollo del proyecto ‘El Cabo’ en el estado de Nuevo México, como puede verse en un documento emitido por los órganos supervisores locales.

El proyecto eólico estará distribuido a lo largo de 33.600 acres en la localidad de Torrance y generará energía por 1.000 megavatios, equivalentes a algo más del doble de la potencia de la polémica central nuclear Santa María de Garoña. De esta manera, podrá dar suministro eléctrico hasta 400.000 hogares, pero de modo mucho más ecológico, como puede leerse en el documento adjunto.

El desarrollo se llevará a cabo durante los próximos 10 años y permitirá la creación de 1.600 puestos de trabajo. La adjudicación se realizó el pasado 19 de septiembre, mediante subasta pública.

Go west

Iberdrola está presente en Estados Unidos desde el año 2006, cuando, llevó a cabo varias adquisiciones de promotores eólicos estadounidenses: Community Energy Inc, así como MREC Partners y su participada Midwest Renewable Energy Projects.

Tal como destacan desde la propia entidad, fue a partir de 2007 cuando el grupo dio el gran salto, con la compra de ScottishPower, mediante la que se hizo con el control de una de las principales compañías eólicas de EE.UU, PPM y, también, con la adquisición de Energy East, que supuso su entrada, fundamentalmente, en el negocio del transporte y distribución de energía del país.

Este martes, la entidad que preside Ignacio S. Galán es el segundo operador eólico, con presencia en 18 estados y 5.443 megavatios (MW), cifra que representa más del 38% de toda la capacidad eólica del Grupo. 

Entre 2012 y 2013, el grupo prevé destinar a este país el 16% de todas las inversiones, alrededor de 1.700 millones de euros, sobre todo para proyectos de redes y energías renovables. 

El maduro mercado español, unido a la reforma energética en ciernes que tanta controversia suscita entre las compañías domésticas hace que las energéticas se busquen la vida en el exterior y EE UU ha demostrado ser una zona de éxito. No sólo para Iberdrola: otras como Abengoa o Acciona también hace tiempo que operan allá. 

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