Quantcast

Economía

El Gobierno italiano aviva su guerra contra Atlantia y complica el plan estratégico de Abertis

El nuevo consejo de administración de Abertis, nombrado el pasado diciembre

El entorno de Atlantia, principal accionista de Abertis, se complica por momentos. El clima de enfrentamiento entre el grupo italiano y el Gobierno de Roma se avivará tras la reforma tarifaria que ultima el Ejecutivo transalpino, especialmente dura con las concesionarias. Aun bajo la amenaza de que sus concesiones sean retiradas como consecuencia de la tragedia del puente Morandi, Atlantia ha puesto en marcha un plan de venta de activos para reducir la enorme deuda asumida como consecuencia de la adquisición de la compañía española, conjuntamente con ACS. Un escenario que incrementa la incertidumbre en torno al grupo controlado por la familia Benetton y también sobre el plan estratégico de Abertis, que no termina de ver la luz pese a que el cambio de control se hizo efectivo el pasado octubre.

Las acciones de Atlantia sufrieron un notable desplome, superior al 4%, en la última sesión bursátil de la semana después de que trascendiera que el Gobierno prepara una reforma de tarifaria especialmente perjudicial para las propietarias de las concesiones. En el mercado se ha interpretado como el penúltimo enfrentamiento entre el Ejecutivo y Atlantia, que se inició en agosto del pasado año tras el hundimiento del puente Morandi, en Génova, que causó la muerte de 43 personas.

En las últimas semanas, Atlantia también se ha situado en medio de las habituales controversias entre las dos formaciones que constituyen el Gobierno, la Lega y el Movimiento Cinco Estrellas, en este caso por el plan de salvamento para Alitalia, que Roma prepara desde hace tiempo. Parte del Ejecutivo es favorable a una posible entrada del grupo de concesiones en el capital de la antigua aerolínea de bandera, especialmente centrado en salvar los 11.000 empleos que están en juego.

Una opción que abriría la puerta a la posibilidad de que Atlantia negocie la paz con el Gobierno en materia de autopistas a cambio de su entrada en Alitalia. Sin embargo, otra parte del Ejecutivo se opone a contar con la concesionaria para la operación de salvamento de la aerolínea (en la que ya están embarcados la empresa pública Ferrovie dello Stato y la aerolínea estadounidense Delta Airlines), una alternativa que cobra cada vez mayor fuerza.

Ventas para financiar la operación

Mientras, la agencia Reuters aseguró que Atlantia ya ha puesto en manos de la banca de inversión la venta del 30% de una de sus joyas, Telepass, la compañía que desarrolla del sistema de pago automático en los peajes y que la compañía italiana implanta en todas sus concesiones. Los ingresos de la operación irán destinados a reducir la deuda, que se ha disparado por encima de los 38.000 millones de euros, precisamente a raíz de la compra de Abertis.

Todos estos elementos están además aderezados por la batalla interna en el seno de la familia Benetton, primer accionista de Atlantia con una participación del 30%. La próxima semana, la asamblea de socios del holding formalizará la salida de Marco Patuano como consejero delegado, movimiento que se produce como consecuencia de las luchas intestinas en el conglomerado empresarial familiar y que llevará a Carlo Bertazzo a ocupar su puesto.

Precisamente, Bertazzo forma parte del consejo de administración de Abertis en representación de Atlantia (junto al consejero delegado de la concesionaria italiana, Giovanni Castellucci). El ejecutivo aseguró en la junta de accionistas de Atlantia que la empresa tenía demasiados frentes abiertos, en referencia a la posibilidad de entrar en el capital de Alitalia. Todos esos frentes se están volviendo en contra del grupo italiano y, de alguna forma, están impactando en Abertis.

Discutida inminencia

La concesionaria española espera su plan estratégico desde finales del pasado año, cuando Atlantia y ACS tomaron su control efectivo y constituyeron un nuevo consejo de administración. En el primer trimestre de 2019, Abertis formalizó una emisión de bonos prevista como parte de la financiación de la operación de compra. Por entonces, los nuevos propietarios ya hablaron de la inminencia del plan estratégico, algo que repitió a comienzos de mayo Marcelino Fernández Verdes, presidente de Abertis, tras la junta de accionista de ACS, de la que es consejero delegado.

La situación de Atlantia en Italia está jugando en contra de la confección de una nueva hoja de ruta para Abertis que deberá, entre otras cuestiones, arrojar luz sobre el papel que representará España en su negocio, cuando la mayor parte de sus concesiones están próximas a finalizar.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.