Publicado: 22/04/2013 04:00
La Generalitat catalana sólo ha conseguido recortar el gasto corriente en bienes y servicios un 1 por ciento durante 2012, una vez se contabilizan todas las facturas declaradas pero sin pagar de la llamada cuenta 413.
Según los cálculos del observatorio de las Comunidades Autónomas confeccionado por el think tank Fedea, Cataluña es una de las comunidades que menos recorta en este apartado, sólo superada por Murcia y por regiones como País Vasco, Navarra o La Rioja que tienen mucho más controlados sus presupuestos. De hecho, las autonomías han reducido el gasto corriente de media un 9 por ciento si se descuentan los efectos de la cuenta 413.
De acuerdo con las evaluaciones de los planes de reequilibrio financiero publicadas por Hacienda, al final del tercer trimestre de 2012 la Generalitat de Artur Mas sólo había conseguido recortar 1.574 millones de los 2.687 comprometidos. Y del lado de los ingresos, apenas había recaudado 468 millones de los 1.810 previstos.
Sin embargo, en el último tramo del año Hacienda restringió los recursos a Cataluña y sólo abonó mediante el Fondo de Liquidez Autonómico aquello que se consideraba esencial, lo que contribuyó de manera decisiva a mejorar las cuentas de la Generalitat. Respecto a los ingresos, éstos aumentaron al privatizar las Aguas del Ter-Llobregat y los túneles del Vallvidrera y del Cadí. Con todo, el déficit de la región al final se situó prácticamente en el 2 por ciento, lejos del 1,5 de objetivo.
Sin presupuestos, más gasto
Sin los apoyos parlamentarios suficientes, la Generalitat es el único ejecutivo autonómico que no ha elaborado sus presupuestos para 2013, a la espera de que Europa brinde una relajación del objetivo de déficit que el Gobierno central comparta con las comunidades.
Los datos conocidos hasta febrero revelan que Cataluña es la comunidad que más déficit acumula, en concreto la mitad de todo el generado en 2013, unos 677 millones de los 1.277 registrados por el total de las autonomías. La forma en que se ha disparado el desfase hace pensar que el govern haya podido trasladar desembolsos del 2012 a este año.
La consellería dirigida por Andreu Mas-Colell ya baraja suprimir de nuevo la paga extra de los funcionarios para repetir los ahorros en personal por valor de 740 millones de euros. El resto de tijeretazos en Cataluña se han centrado sobre todo en las inversiones y transferencias. En 2012, el pago de intereses por la deuda de la Generalitat rondó los 2.000 millones, un tercio más que el año anterior.
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