Publicado: 14/04/2014 04:00
Más de la mitad de las reclamaciones de la Agencia Tributaria se pierde en los tribunales. Los jueces tumban buena parte de las sanciones impuestas por el fisco hasta el punto de que la recaudación derivada de fallos de los tribunales se ha hundido desde los 1.412 millones de euros en 2012 a menos de 463 millones en 2013. Ante esa situación, la Agencia Tributaria está sometiendo a sus cuerpos de inspectores a formación con magistrados de la Audiencia Nacional, según confirman fuentes de la inspección.
En las últimas dos semanas, al menos dos magistrados del tribunal especial encargado de "los delitos económicos que causan grave perjuicio a la economía nacional" han impartido cursos a los inspectores sobre los procedimientos que siguen los jueces, la validez de las pruebas que se aportan y sobre las cuestiones claves que suelen derivar en la nulidad de proceimientos iniciados por el fisco.
La formación especializada de sus cuerpos de inspección ha sido una reclamación histórica de la Organización Porfesional de Inspectores del Estado y de los técnicos de Hacienda que siempre han reclamado dos cuestiones: la especialización y, sobre todo, el refuerzo de unas plantillas de inspectores que han sido recortadas un 8% desde que comenzó la crisis.
La inspección califica de "cosméticos" los anuncios de contratación pública para la Agencia Tributaria
Sin embargo, los funcionarios consultados culpan al Ejecutivo de buena parte de los fracacos de la inspección en los tribunales. Aseguran que la normativa que se está aprobando dificulta la persecución del fraude. De hecho, en un manifiesto público, aseguraban que "los trabajadores de la Agencia Tributaria (...) no dictamos la normativa, sólo nos limitamos a aplicarla" y denunciaban que se estaban aprobando "leyes injustas que sólo favorecen a una minoría privilegiada, como es el caso de la Amnistía Fiscal, verdadero insulto a los trabajadores de la AEAT y a todos los ciudadanos –afortunadamente la mayoría- que pagan religiosamente sus impuestos. ¿Cómo explicar a esos contribuyentes que a los defraudadores de este país se les permite lavar su dinero con el módico coste medio del 3% de los capitales aflorados?. ¿No es ésta una invitación al fraude?", concluían.
El saldo de esa lucha contra el fraude ha sido de una caída del 9% en los últimos 12 meses, desde los 11.517 millones de euros hasta los 10.950 millones de recaudación, el primer retroceso en la serie desde la década de los 80. El director de la Agencia Tributaria, Santiago Menéndez, disputa esa cifra pese a haberla presentado así oficialmente con el argumento de que fueron precisamente las sentencias judiciales del Tribunal Supremo favorables al fisco el año pasado las que inflaron la recaudación de 2012.
Las sentencias judiciales en 2013 apenas han reportado 463 millones de euros al fisco frente a los 1.412 millones de ingresos que supusieron el año anterior. Hacienda no especificó el año pasado que aquellos resultados hubieran sido "inflados" por las sentencias judiciales y atribuyó la cifra global a un éxito en la lucha contra el fraude, en palabras de la ex directora, Beatriz Viana. El año anterior, la recaudación también superó los 1.035 millones e incluso en 2010 los fallos del Supremo favorables al fisco casi duplicaron los de los últimos 12 meses, hasta suponer unos ingresos de 765 millones.
Políticas en favor del cobro inmediato
Los inspectores consultados denuncian que la formación que están recibiendo por parte de los magistrados de la Audiencia Nacional, sin embargo, no refleja la política recaudatoria vigente y asegura que tienen orden de priorizar la captación urgente de fondos con recargos menores a los que impone un procedimiento judicial porque se está primando la urgencia al volumen de la recaudación.
La inspección denuncia como "cosméticas" los últimos anuncios de empleo público para la Agencia Tributaria. El fisco cuenta a día de hoy con menos inspectores que antes de que comenzara la crisis. La congelación de las plantillas fue dictada por el Gobierno que fijó una tasa de reposición de sólo el 10%, es decir, que de cada 100 bajas sólo se reponen 10. El director de la Agencia Tributaria ha asegurado que "el problema de la lucha contra el fraude no es de medios sino de concienciación". La plantilla de inspectores de Hacienda ha menguado casi un 8% en los últimos dos años hasta dejar el total del personal de Hacienda en 26.500.
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