Johnson, que desde 2011 era la mujer más anciana en correr esta prueba, era una figura conocida en todo el país por su espíritu atlético. La veterana y famosa corredora sufrió una caída en torno al kilómetro 32 de la prueba y se golpeó la cabeza, por lo que fue tuvo que ser vendada, aunque rechazó ir a un hospital y concluyó la prueba en algo menos de ocho horas.
El lunes acudió a una cita tradicional con un programa de televisión matinal de NBC, tras el cual dijo a su hermana que no se encontraba bien, tras lo cual volvieron al hotel donde se alojaban en la ciudad, donde se durmió y no volvió a despertarse. Fue trasladada de urgencia al hospital Bellevue, donde fue declaró formalmente su fallecimiento.
Johnson corría entre 40 y 90 kilómetros cada semana después de que comenzó a correr con 59 años, y con el paso del tiempo había aparecido en algunos de los principales medios de comunicación generalistas y de aficionados al atletismo. Su hija, Diana Boydston, declaró desde San José (California) que su madre murió "de la forma en que quería irse".