Quantcast

Deportes

Imputan a los jugadores del Montpellier que apostaron contra su club

Los jugadores de balonmano del Montpellier, entre ellos Nicola Karabatic, arrestados el pasado domingo en el marco de una investigación por apuestas ilegales y presunto amaño de partidos, fueron imputados este martes por un delito de estafa, al igual que algunos de sus allegados.

Entre los imputados también se encuentra Luka Karabatic, hermano del mejor jugador del mundo, además del portero del equipo Primoz Prost y de Samuel Honrubia y el serbio Mladen Bojinovic, que fueron fichados al final de la pasada temporada por el París Saint-Germain. También están imputadas las esposas de los hermanos Karabatic.

Según el abogado de Nicola Karabatic, el jugador negó haber participado en las apuestas, a diferencia de los otros imputados, que reconocieron haber apostado a que el Montpellier perdía en el descanso de un partido disputado el pasado 12 de mayo contra la modesta formación del Cesson-Sévigné, algo que está sancionado por la ley con penas administrativas. Pero todos negaron haber amañado el partido, un delito que puede ser sancionado hasta con cinco años de cárcel y 75.000 euros de multa.

Junto a ellos, fue imputado el dueño de un bar de apuestas de Montpellier que los investigadores consideran como el instigador de las apuestas de los jugadores y que, él mismo, apostó más de 25.000 euros en ese partido. Otros tres apostadores también fueron imputados en el caso.

Los abogados de los imputados indicaron a la prensa que los jugadores reconocen haber cometido una falta la haber apostado, pero niegan que amañaran el resultado del partido. El letrado de los hermanos Karabatic se mostró muy tajante en este punto y recordó que ninguno de sus dos clientes participó en aquel encuentro, porque estaban lesionados. "Que alguien me explique cómo se puede amañar un partido en el que no se juega", afirmó el letrado de Karabatic, Eric Dupond-Moretti.

Pero la Fiscalía de Montpellier mantiene la investigación para determinar si el partido fue amañado y aseguró tener indicios de que existía un "pacto de corrupción" entre los jugadores. Todos los imputados, que habían pasado dos noches en dependencias policiales tras su arresto el pasado domingo en París, donde disputaban un partido, fueron dejados en libertad bajo fianza.

Además, los jueces les impusieron otras medidas cautelares, como la prohibición de comunicarse entre ellos, lo que les impedirá jugar juntos. La investigación se abrió después de que el organismo estatal de apuestas de Francia detectara un nivel anormalmente elevado de apuestas sobre el resultado al descanso del encuentro entre el Montpellier y el Cesson-Sévigné, disputado justo después de que el Montpellier ganara el noveno título de los últimos diez.

"Era el partido ideal para apostar", indicó el fiscal, Brice Robin, que reveló que los jugadores lograron unas ganancias de 252.880 euros, tras haber concentrado sus apuestas en agencias de Montpellier, París y Rennes, donde se disputaba el encuentro.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.