Deportes

Acoso y derribo a Ancelotti, el nuevo empeño del madridista indignado ante una temporada anómala

El entrenador más laureado en toda la historia del club blanco, acusado del declive futbolístico del Real Madrid

  • Carlo Ancelotti, el entrenador del Real Madrid CF -

Todo eran elogios y flores en junio. En agosto, con el fichaje de Kylian Mbappé, había quiénes se frotaban las manos y auguraban un Real Madrid demoledor e imparable. El proyecto de los 'Galácticos 2.0' también parecía convencer al madridismo y a la cabeza de todo ello volvía a estar aquel mago que rompió la sequía hace más de diez años en Lisboa. Sin embargo, Carlo Ancelotti, el técnico más exitoso en la historia del Real Madrid con 15 títulos -con la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental de esta campaña- atraviesa uno de sus momentos más críticos en el banquillo blanco.

A decir verdad, el Real Madrid aún sigue aspirando al ambicioso triplete. En LaLiga, tras la victoria este domingo ante el Deportivo Alavés (0-1) en Vitoria, los merengues siguen la estela -a cuatro puntos- del FC Barcelona. Mismos protagonistas tendrá la final de la Copa del Rey del próximo 26 de abril. Por último, la competición 'fetiche' de los blancos -la UEFA Champions League- es la que parece haberse torcido un poco más. Este miércoles, el Real Madrid recibe en el Bernabéu al Arsenal jugándose un puesto en las semifinales de la copa continental. El resultado es adverso (3-0 en el Emirates Stadium), pero la historia ya ha vivido más veces momentos como este.

A lo que el madridismo no está tan acostumbrado es a los resultados irregulares y a una falta de brillo más que evidente en el juego de su club. Ahí llegan los problemas.

Este último mes ha sido particularmente difícil para el Real Madrid. Además de la ya mencionada derrota ante el Arsenal FC en Europa, el equipo blanco cayó hace una semana en casa frente al Valencia (1-2). A ello se le suma también el sufrido empate ante la Real Sociedad en la vuelta de las semifinales de copa y las dos mínimas victorias ante el CD Leganés (3-2) y el Rayo Vallecano (2-1) jugando como locales. El Santiago Bernabéu, tradicionalmente un fortín, ahora no se ve tan inexpugnable.

Carlo Ancelotti durante una rueda de prensa de Champions esta temporada | EFE

Este fenómeno, no obstante, no se deriba únicamente a estos últimos 30 días. Las lesiones también han jugado un papel importante en este declive. La ausencia de jugadores clave, como el caso de Dani CarvajalÉder Militao, durante la totalidad de esta ha afectado en el rendimiento del equipo, así como bajas temporales de otros muchos titulares con las que Ancelotti ha tenido que ir reconfigurando su once prácticamente semana tras semana. Además, muchos entendidos hablan de una pérdida de identidad prácticamente total tras la llorada salida de Toni Kroos.

La marcha del alemán ha dejado un vacío que Ancelotti no ha logrado llenar. El Real Madrid ha perdido su brújula, transitando hacia un fútbol mucho más directo y menos elaborado, fiándolo todo así a las genialidades aisladas de sus atacantes. Que tampoco están este año como para tirar cohetes. Luka Modric y Dani Ceballos, en ciertos momentos, han intentado aportar algo de orden, pero las restricciones físicas del croata -39 años- y la reciente lesión de Ceballos han terminado por desmontar cualquier atisbo de control. El juego del Real Madrid es ahora errático, sin un hilo conductor claro y eso ha afectado a su competitividad en las citas importantes.

Ancelotti lo admitía en Londres: "No hemos sido compactos en toda la temporada". Y lejos de corregir ese problema, el italiano ha optado por mantener a un equipo partido entre líneas, con una defensa expuesta y con un medioocampo incapaz de ofrecer el equilibrio necesario. Su corazón late por los impulsos individuales. Rivales con sistemas bien trabajados han expuesto brutalmente esas carencias. Es más, las once derrotas en el curso presente -comparadas con las dos del año pasado- son el perfecto reflejo de un problema de estructura grave. Una ausencia de solidez total que han aprovechado equipos como el AC Milán o el FC Barcelona para arañar.

Las comparaciones nunca fueron buenas

Otro de los puntos por los que el madridismo sitúa a Ancelotti bajo la lupa es emerge gracias a la presión del buen hacer, tanto físico como futbolístico, del eterno rival. Allí, Hansi Flick parece que sí ha encontrado lo que al italiano tanto se le resiste: un juego sólido y efectivo que pone a temblar a Europa. Lamine Yamal y Raphinha se sienten libres y cómodos por las bandas; Robert Lewandowski ha recuperado ese olfato goleador que tanto le ha caracterizado siempre; Pedri vuelve a enamorar a los amantes del fútbol y cuesta ver a algún dorsal del once blaugrana remar en contra.

La frescura y la potencia también parecen caer de su lado. Nunca es bueno hacer tantas comparaciones, pero si esta temporada existe una clara diferencia entre los dos 'grandes' del fútbol español esa radica en el estado de forma de sus jugadores. Por ejemplo, frente al Arsenal, el Real Madrid corrió 12 kilómetros menos. Una cifra devastadora que habla de un equipo falto de piernas y de convicción. Esta caída física se traduce además en una menor agresividad, menos presión tras pérdida y una incapacidad para competir al máximo nivel durante los noventa minutos. Y de esta otra guerra nace una crisis de desentendidos entre Ancelotti y Antonio Pintus.

Jude Bellingham (5) es uno de los jugadores más empleados por Carlo Ancelotti | EFE

Los cambios de Carletto tienden siempre a producirme más bien a partir del minuto 70 del partido. En otras temporadas puede que este factor pasara más desapercibido, pero es algo en lo que el entrenador físico merengue también ha deparado. Con una plantilla algo más reducida -por el alto número de las lesiones y amonestados semanales- y con el calendario más cargado todavía si cabe, Pintus ha comunicado varias veces esta campaña a Ancelotti que el equipo está al límite. Volviendo a Londres como ejemplo, el Real Madrid dejó sin usar una vez más todos los cambios disponibles mientras su equipo era superado física y tácticamente.

Promesas como Endrick y Arda Güler apenas tienen protagonismo esta temporada, mientras que jugadores de experiencia como Brahim Díaz no han tenido continuidad ni minutos relevantes en encuentros decisivos. Esta resistencia al cambio genera una sensación de bloqueo táctico que penaliza aún más si cabe a un equipo ya de por sí debilitado. Y para nada ayuda a escapar de la cuerda floja al entrenador italiano.

Un ciclo que parece estar agotado al máximo

Finalmente, a todo ello se le suma la tentación sudamericana: Brasil no ha cerrado en ningún momento la puerta a que Ancelotti sea su seleccionador durante las próximas campañas. Además de la propia Federación Brasileña de Fútbol (CBF), varios son los jugadores que ya han elogiado una futura plantilla dirigida por el de Reggiolo. El mismo Vinícius Junior ha defendido dicha postura en varias convocatorias con la 'Canarinha'. Que todas estas noticias florezcan justamente en el año en el que el Real Madrid no logra despegar no han ayudado a calmar los ánimos por Chamartín.

Carlo Ancelotti, con la medalla de la Champions de 2024 colgada en el cuello | EFE

El madridismo pide un cambio y más que eso quiere que el Real Madrid vuelva a jugar al fútbol. Parece simple, pero este deporte no se compone solo de veintidós jugadores corriendo detrás de una pelota. De ahí a que Florentino Pérez conceda la 'extremaunción' al italiano pueden pasar muchas cosas. No obstante, las redes sociales lo tienen claro: el puesto de Ancelotti debería ocuparlo o bien Xabi Alonso (que ha renovado contrado con el Bayer Leverkusen hasta el 2026, como Carletto) o bien José Mourinho. No sería locura pensar tampoco en RaúlÁlvaro Arbeloa.

Sí es cierto que, salvo un milagro -una épica remontada ante el Arsenal y algún título más inesperado- el destino de Ancelotti parece sellado. La Copa del Rey, incluso si se ganara, no cambiaría en demasía el guion que en el Real Madrid contemplan. El club ya piensa en un centrocampista organizador, en reforzar la defensa y en cambiar la filosofía del banquillo para recuperar la identidad competitiva perdida.

Lo ha ganado todo con el Real Madrid. Es su entrenador más laureado. ¿Un voto de confianza más para Ancelotti o periodo de revolución en el banquillo merengue?

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli